Esta semana llegaron a las salas rosarinas el filme de suspenso "En lo profundo", un digno homenaje al cine de Hitchcock; "Super 8 Stories", el informal documental de Emir Kusturica sobre su grupo No Smoking Orchestra; y la nueva película protagonizada por Michael Douglas, "Ni una palabra".
"En lo profundo"
Intérpretes: Thora Birch, Desmond Harrington y Daniel Bocklebank.
Dirección: Nick Hamm.
Género: suspenso.
Duración: 102 minutos.
Sala: Village.
Calificación: 3 estrellas.
Nick Hamm no puede negar que admira a Alfred Hitchcock, y "En lo profundo" es un digno homenaje al cine del Mago del Suspenso. Hay un falso culpable, el mal triunfa y una historia engañosa que fluye con naturalidad y pone los pelos de punta sin necesidad de pegar golpes bajos.
El comienzo del filme hiela la sangre: una joven andrajosa camina a tientas, primero por un bosque, luego por una carretera, hasta llegar al imponente edificio señorial de una escuela. Allí busca un teléfono público, alza la bocina y cuando la atienden lanza un alarido estremecedor.
La muchacha, junto a otros tres estudiantes, desapareció durante dos semanas, y a su regreso presenta signos de haber sido violentada. Qué le pasó es un misterio, y la película intenta, siguiendo el hilo de la investigación que lleva adelante una tenaz mujer policía, desentrañarlo.
La narración se estructura a partir de los relatos de la joven y del de su mejor amigo, un nerd que reniega de los usos y costumbres que impone la tradición de su colegio. Engañoso, el recurso, dado que las versiones que se dan de los hechos son diferentes, alimenta el suspenso.
Thora Birch, la joven en cuestión, demuestra una vez más -ya lo había hecho en "Belleza americana" - que puede componer personajes esquemáticos con matices y, además, revela que es capaz de cargar sin que se le quiebre la espalda todo el peso del drama. Una suerte para la película.
R.L.
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"Super 8 stories"
Intérpretes: Emir Kusturica, Nelle Karajilic y Stribor Kusturica, entre otros.
Dirección: Emir Kusturica.
Género: documental.
Duración: 90 minutos.
Salas: Del Patio y Village.
Calificación: 3 estrellas.
Antes de decir cualquier cosa sobre "Super 8 Stories", el informal documental de Emir Kusturica sobre su grupo No Smoking Orchestra, habría que aclarar que este combo es una banda maravillosa. A la No Smoking Orchestra no le falta nada. Tiene la garra del rock, la furia del punk, el vigor del ska, y el encanto irresistible de la música gitana. Con escenas de sus calientes recitales, los testimonios de sus músicos, y el escenario político y social de los Balcanes, el documental parece hacerse solo.
La cámara registra tanto la energía de los shows en vivo como las historias de los 11 integrantes de la banda, desde un saxofonista fanático del jazz hasta un trombonista que se gana la vida tocando en funerales. Cada testimonio está marcado por el destino de la ex Yugoslavia, un país mutilado y dividido. Emir Kusturica se ubica en un discreto segundo plano, y deja que sus compañeros se expresen y demuestren lo que pueden tocar.
También es cierto que hay referencias musicales que hacen que la película se transforme en un producto para iniciados, aunque también es innegable que cualquier espíritu sensible podría entretenerse y hasta emocionarse con las aventuras y desventuras de estos músicos, que incitan hasta la carcajada cuando tratan de imitar a Deep Purple haciendo "Humo sobre el agua".
Al final, un delirante videoclip, que recuerda a una película muda y lleva el inconfundible sello de Kusturica, muestra a la No Smoking Orchestra tal cual es: una verdadera banda de gitanos.
C.T.
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"Ni una palabra"
Intérpretes: Michael Douglas y Brittany Murphy.
Género: suspenso.
Dirección: Gary Fleder.
Duración: 115 minutos.
Salas: Monumental, Del Siglo y Village.
Calificación: 2 estrellas.
La nueva película protagonizada por Michael Douglas comienza de una manera un poco compleja pero interesante. Hay varias historias en paralelo que le dan un buen ritmo y llevan adelante, con solvencia, el suspenso. Sin embargo, ese interesante inicio decae con el transcurso de la película.
En la historia de "Ni una palabra", Douglas es un psiquiatra neoyorquino exitoso que atiende a niños y adolescentes. Un día acepta el caso grave de una joven. La chica vio cómo mataban a su padre y desde entonces no ha podido quitarse de la cabeza al asesino, y a la vez ha negado una relación normal con el mundo.
El asesino está al tanto del tratamiento que sigue la chica y como necesita un secreto que ésta posee en algún recoveco de su mente, no tiene mejor idea que extorsionar al psiquiatra para que halle el secreto. Por eso secuestra a la hija del doctor y le da un plazo, extremadamente corto para que averigüe el famoso dato. En verdad, una confianza ciega en el poder la psicología que sólo un loco puede tener.
El suspenso de la película se pierde en el exceso de palabras intrascendentes de los protagonistas y las referencias a Alfred Hitchcock tan promocionadas por Gary Fleder, el director del filme, dan un poco de vergüenza ajena porque no sirven para nada, o en todo caso sólo para extrañar el talento del maestro.
F.T.
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