Año CXXXIV
 Nº 49.289
Rosario,
sábado  03 de
noviembre de 2001
Min 15º
Máx 29º
 
La Ciudad
La Región
Política
Economía
Opinión
El País
Sociedad
El Mundo
Policiales
Escenario
Ovación
Suplementos
Servicios
Archivo
La Empresa
Portada


Desarrollado por Soluciones Punto Com






Reutemann ya calienta motores para ponerse en la primera fila

Omar Bravo

Al establishment político, a funcionarios instalados en Buenos Aires desde hace años, así como a veteranos operadores de prensa, no le quedan dudas: Carlos Reutemann ya opera su decisión de ser candidato presidencial. Es más, si esos comicios que hoy parecen remotos se adelantaran producto de la crisis política, no querría ser sorprendido con el motor frío.
El fin de año encuentra al Lole con un balance inmejorable en relación a su política de silencio y mesura. Este dato, que volvería loco a cualquier estratega de medios, arroja un efecto paradojal: Reutemann habla poco, no asiste a programas líderes de la TV metropolitana, pero esa actitud en vez de quitarle posibilidades ante sus colegas presidenciables, robustecen el tremendo atractivo que su figura ejerce en los medios audiovisuales.
"A la gente le queda la impresión de que Reutemann habla de cuestiones que la tocan de cerca, que no se mezcla en polémicas ni en contradicciones comunes en los políticos", dijo una experimentada fuente ligada a la difusión del PJ. Incluso, su reciente enojo con Domingo Cavallo fue recibido con una mezcla de simpatía y sorpresa aprobatoria de parte de sus pares que administran las provincias chicas.
Y ya surgen las comparaciones. La hasta ahora inmaculada figura del cordobés José Manuel de la Sota empieza a sufrir los efectos de dos orígenes concretos: la importante deuda pública de su administración y su cada vez más evidente vinculación política con Cavallo.
Para la mayoría de los observadores, el rival de Reutemann no será otro que Carlos Ruckauf, con gran capacidad de reacción para los momentos de crisis, como lo demostró cuando el efecto Patacón pareció arrastrarlo.
Y, si de efectos se trata, aquella decisión del Banco Mundial de otorgarle un importante crédito reforzó el favoritismo del Lole entre el establishment económico local, que ya en abril pasado, nada menos que por boca de Roberto Alemann, expresó su preferencia. Una fuente inobjetable confirmó un adelanto de La Capital: "Mantuvo encuentros con líderes de empresas y economistas, todos los grandes".
Pero hay datos novedosos: Reutemann ahora analiza en frío sus puntos débiles. Nadie de su entorno operó sobre los medios porteños para corregir el mensaje de que Santa Fe fue la capital del voto bronca, cuando sus candidatos provinciales recolectaron casi 600 mil votos. "El Lole lo extrañó más que nunca al Tano (Domingo) Cutuli", su operador histórico fallecido recientemente, dijo un consultado. Reutemann también empieza a advertir que su crecimiento no es acompañado por una evolución similar de la dirigencia santafesina que lo secunda, que no comprende en su totalidad la escena nacional.
Un fan automovilístico de Reutemann le dejó un consejo para ganar la interna: A fines de los 70, en Brasil, el Lole largó cuarto detrás de Andretti, Hunt y Peterson. Cuando movieron, el inglés Hunt se corrió hacia la derecha para cerrarle el paso a los dos Lotus, sin advertir que dejaba el lado de afuera libre. Por allí partió como una flecha la roja Ferrari piloteada por Reutemann, que tomó la delantera y ya no la dejó hasta la victoria final.


Diario La Capital todos los derechos reservados