Fue el mismo Federico Arias el que confirmó la noticia de su venta. Luego de terminar la práctica en la ciudad deportiva de ayer, el delantero aseguró que "me enteré de la venta ayer (por el jueves)" y que "no me informaron a qué equipo voy. Eso lo está manejando mi papá, que es el que me representa". Hasta esa hora por lo menos, el Torpedo no tenía idea de que se trataba del Avellino, de la cuarta categoría del fútbol italiano. Arias se mostró tranquilo con la posibilidad de jugar en otro fútbol pero a la vez no ocultó la tristeza que le produce dejar Central, probablemente a fin de año. "Esta venta no compensa el hecho de que no juegue contra Independiente. Es más, a mí me deja un sabor amargo porque jugaría siempre en Central". El delantero auriazul no quiso ponerse a juzgar a los dirigentes por la urgencia en vender jugadores, pero sí señaló que "el club necesitaba un ingreso de dinero para solucionar los problemas económicos. Por eso es importante esta venta". Lo que sí confirmó Arias es que la venta "no tiene nada que ver" con la exclusión para el partido de esta noche "porque se realizó ayer y yo ya sabía desde principios de semana que no iba a jugar". En cuanto a las causas de la decisión de Juan José López de sacarlo del equipo, Arias prefirió ser cauto y no generar polémicas, aunque él tiene claro que "sé que hice las cosas bien cuando me tocó jugar". Arias refirió que el jueves el entrenador tuvo una charla con él y que allí le explicó los motivos de su decisión, "y yo la tengo que aceptar porque él tiene todo el derecho de elegir los jugadores que crea conveniente. Ahora sólo me toca seguir trabajando duro, mejorar en las cosas que el técnico me dijo y esperar jugar el clásico, que es algo muy lindo". El Torpedo aseguró además que "no me veía venir esa decisión". Si bien la venta a un grupo empresario hace pensar en la inmediata asociación con la exclusión del equipo, lo cierto es que se trató de una decisión exclusiva del técnico y de ninguna manera sería por una cuestión táctica, más cuando el pibe César Delgado aseguró tras la práctica de ayer, quizás inocentemente, que López le había dado las mismas indicaciones que en su momento al Torpedo. Todo hace suponer que, más allá del resultado y de la actuación de esta noche de Delgado frente a los diablos rojos de Avellaneda, Arias retornará en el que sería su último clásico antes de partir rumbo al Viejo Continente.
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