Rodolfo Bella
Intérpretes: Ramón Barea, Marga Escudero, Patricia García Menéndez, Pepo Olivca, Carmen Pardo, Luis Alberto García y Magalis Gaínza.
Guión y dirección: Enrique Gabriel.
Duración: 92 minutos.
Género: drama.
"En la puta calle" narra la degradación que supone el desempleo. Rodada en España en 1996, puede ser un reflejo de lo que ocurre en cualquier otro lugar del mundo en una época no determinada. Dos personajes centrales, un cubano emigrado y un español, marcan el rumbo ideológico del filme que tiene como particularidad la mirada del director Enrique Gabriel, de origen argentino y radicado en España.
El personaje español y el cubano se encuentran, junto a otros de distintas nacionalidades, en un suburbio de una ciudad española donde son recogidos por alguien que se encarga de conseguirles trabajo. El español es un electricista es asignado a una obra en construcción. Más tarde, cuando los dos hayan perdido su empleo, se reencontrarán para iniciar una amistad en la cual ambos intentan distintas formas de aprendizaje.
El recorrido que hacen los dos personajes le sirve al director para mostrar cómo la desocupación no es un privilegio de ningún país y los estragos que provocan son comunes a todos quienes lo padecen, sean sudamericanos o europeos. Narrado en forma realista, el filme recurre a un tratamiento alejado de esteticismos para acentuar la crudeza del relato.
La historia comienza cuando Juan, el español, abandona su casa de provincia, para ir a Madrid. Instalado en la capital, las cosas no mejoran y en los periódicos llamados telefónicos que le hace a su mujer le miente sobre los supuestos progresos que está logrando. El personaje oculta no sólo la inicial escasez de dinero, sino también la creciente pauperización de su situación hasta acabar, como indica el título del filme, literalmente en la calle.
Allí es cuando se cruza nuevamente en su camino, Andy, un cubano indocumentado. El personaje representa todo aquello que José ya no tiene o nunca conoció. La paradoja de los personajes es que teniendo personalidades y actitudes opuestas hacia un conflicto similar que los afecta por igual, las circunstancias los equiparan a una misma categoría de excluidos que no reconoce fronteras ni categorías de mundos.
Sin embargo el enfrentamiento sobreviene en diálogo con la mujer de Andy quien le manifiesta sus críticas a España. La inevitable xenofobia se instala como parte del discurso del español con la consiguiente interrupción de la relación.
Hasta allí el filme mantiene un registro naturalista, casi documental. Pero luego el director se toma la licencia de darle un giro didáctico a la historia sobre la necesidad de ejercer la solidaridad. Aunque la intención es válida, el giro desdibuja el tono de denuncia que había demostrada hasta ese momento.
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La Ciudad
