Los afiliados al Pami se quedaron desde ayer sin cobertura psiquiátrica después de que la Federación de Clínicas y Sanatorios Psiquiátricos decidiera cortar los servicios que presta a la obra social, que les debe desde mayo. En consecuencia, unos 7 mil pacientes de la ciudad quedarán sin tratamientos ambulatorios ni consultas ya que, mientras se extienda la medida, sólo se atenderán urgencias, traslados, y se mantendrá a las personas que se encuentran internadas.
Los titulares de diez clínicas y sanatorios psiquiátricos de Rosario y de tres del sur de la provincia decidieron cortar el crédito a la obra social de los jubilados, en consonancia con la determinación de sus pares en todo el país.
La medida se extenderá hasta que las autoridades centrales del Pami cancelen parte de la deuda por más de cinco meses de prestaciones que mantienen con estos establecimientos.
Así, las clínicas y sanatorios seguirán atendiendo sólo urgencias, traslados e internaciones. En cambio, se resentirán los tratamientos de pacientes ambulatorios y la emisión de recetas de medicamentos.
En este punto, el subinterventor de la delegación local del instituto, Raúl Arriola, solicitó que los psiquiatras sigan prescribiendo medicamentos a los pacientes que sostienen un tratamiento prolongado. Posibilidad que "se resolverá en su momento de acuerdo a cada caso en particular", según indicó el representante de los prestadores y gerente administrativo de la Clínica San Felipe, Carlos Neme.
De todas formas, Arriola recordó a los afiliados que tuvieran problemas para conseguir su medicación que deben denunciar la situación en el Pami Escucha (08002227264) y advirtió que los abogados del instituto podrían presentar recursos de amparo ante la Justicia.
"Pero podemos evitar llegar a esta situación que complicaría aún más las cosas", advirtió el funcionario.
Cinco meses pendientes
Las clínicas y sanatorios psiquiátricos establecieron el corte de servicios después de acumular unos cinco meses de deuda. El último pago que recibieron de las autoridades del instituto corresponde a la mitad de las prestaciones de mayo, más la totalidad de los meses de junio, julio, agosto y septiembre.
El monto exigido asciende, sólo en el sur de la provincia, a los 3,5 millones de pesos, que se les adeudan a 10 clínicas y sanatorios de Rosario y otros tres prestadores de la ciudad de Santa Fe, Reconquista y Carlos Pellegrini.
Estos 13 establecimientos albergan actualmente unos 400 pacientes -en un 90 por ciento internados en Rosario- y además prestan servicios de consultorio a otro grupo de afiliados que oscilaría entre los 7 mil y 10 mil pacientes.