Provincias inundadas piden ayuda a la Nación

Los gobernadores de Santa Fe, Buenos Aires, Córdoba y La Pampa quieren definir una acción conjunta

Buenos Aires. - Los gobernadores de las provincias afectadas por las inundaciones solicitaron al presidente Fernando de la Rúa recursos para paliar las consecuencias del desastre climático. Así lo confirmó ayer el gobernador bonaerense, Carlos Ruckauf, al señalar que los mandatarios solicitaron "una audiencia con los sectores productivos para definir una acción simultánea entre la Nación y las provincias".
Los Estados provinciales que participaron de esta avanzada son -junto a Buenos Aires- Córdoba, Santa Fe, y La Pampa, que sufren las consecuencias de las devastadoras inundaciones que provocaron las últimas lluvias, y que mantienen a miles de personas evacuadas.
El cordobés José Manuel De la Sota, el pampeano Rubén Marín, el santafesino Carlos Reutemann y Ruckauf solicitan a la Nación que derive fondos frescos para aplicar asistencia a las víctimas del desastre climático, al mismo tiempo que batallan por lograr que el Ejecutivo cancele las deudas por fondos coparticipables no girados.
Más allá del pedido formulado a De la Rúa, Ruckauf aseguró que desde las provincias están tomando medidas de ayuda a los inundados, pero se necesita una decisión de la Nación vinculada al orden de prioridades de la utilización de fondos".
"Por la inmensa deuda de la Nación tenemos una gran restricción de fondos, pese a lo cual hemos dotado a los ministros de Agricultura y de Obras Públicas de fondos para poder ayudar", señaló Ruckauf.

Más de mil evacuados
Mientras las consecuencias del avance de las aguas ya se trata al más alto nivel político, las personas evacuadas en la provincia de Buenos Aires como consecuencia de las inundaciones suman 1.149.
En tanto, en la provincia de La Pampa, aún permanecen unas 500 personas evacuadas en la localidad Monte Nievas.
El intendente de la localidad bonaerense de Carlos Casares, José Andreoli, dijo que en su distrito el agua cubre casi todo el partido. "Encauzarla hacia el río Salado se hace muy difícil porque estamos muy lejos, así que nosotros esperamos que salga el sol, que mejore el tiempo y que el agua se vaya escurriendo hacia el verano". (DYN)