Coronda: hongos provocan grandes pérdidas en la industria de la frutilla

Coronda. - Los productores frutilleros no están exentos de los desastres naturales que viene soportando la región. Las grandes precipitaciones que azotan el suelo provincial han provocado una elevada humedad atmosférica que es propicia para que se generen numerosos hongos. Estos elementos hicieron que ya se perdieran cerca de dos millones de kilos de frutillas.
Según declaraciones hechas por expertos, la cosecha venía realizándose con normalidad hasta fines de agosto, pero en septiembre comenzaron las lluvias, hubo muchos días nublados y aumento de humedad. Esto provocó hongos como el moho gris, antracnosis y rizoctonia que afectaron directamente en la calidad y cantidad del producto que luego de mancharse se pudre.
El productor Oscar Taverna, quien explota algo más de 20 hectáreas, sostuvo que "encima que los precios que se pagan por la fruta en este marco de recesión son bajos, tenemos el problema de los hongos, que aunque en los próximos días salga el sol lo que se perdió ya no se recuperará".
Las frutillas, que en épocas normales tienen un rinde de entre 25 mil y 30 mil kilos por hectárea, se siembran en el mes de abril y se cosechan desde septiembre. Sólo los productores que poseen cobertura plástica para proteger las plantas de las heladas y piedras pueden comenzar la cosecha a fines de julio.
Las intensas precipitaciones en la zona hicieron que se agotara la capacidad de absorción e infiltración de agua en los suelos arenosos, lo que generó que muchos establecimientos quedaran bajo las aguas. La zona de Coronda, que depende exclusivamente de la producción frutillera, tiene este año un área plantada de 420 hectáreas y el promedio de fruta tirada asciende a unas cinco mil kilos por hectárea.
Algunos productores sostienen que de persistir las lluvias se tendrá que declarar zona de desastre -como ya lo ha hecho el Concejo corondino a las áreas frutihortícolas del distrito- a los sectores de producción de frutilla, como ya ocurrió en otros años. Por ello reclaman que el Ministerio de la Producción y entidades crediticias ya deberían pensar en estudiar nuevos plazos para que el sector afronte los créditos adquiridos.