Productores con el agua al cuello

La Secretaría de Agricultura de la Nación redujo de 73,8 millones a 70 millones de toneladas las estimaciones de producción para el ciclo 2001/2002, como consecuencia de las fuertes pérdidas que está provocando el exceso de lluvias y las inundaciones en una vasta región productiva.
Con 3 millones de hectáreas bajo el agua en la provincia de Buenos Aires, La Pampa y el sur de Santa Fe, la Sagpya redujo las estimaciones en su último informe mensual, aunque no precisó las cifras cultivo por cultivo. De todos modos, fuentes oficiales y privadas coinciden en una merma de la producción triguera, una caída en el área sembrada con maíz y girasol y un aumento de la superficie sembrada con soja, el cultivo que más puede esperar a que mejore el clima.
La información difundida por Agricultura indica que sólo el 12% del maíz se llevaba implantado hasta la fecha y la caída en el área de siembra oscilará entre 6 y 9 puntos respecto de la campaña anterior. En soja, se espera que la superficie salte a 11,2 millones de hectáreas.
En la provincia de Santa Fe, la situación más compleja se vive en el departamento de General López, donde el agua no escurre, provocando el desborde de lagunas.
El ataque de fusarium al cultivo de trigo está preocupando a productores e industriales, que además alertaron que el stock de fungicidas está casi agotado.
La difícil situación provocada por inundaciones y exceso de precipitaciones se suma a las restricciones financieros que padecen los productores, lo que conspira contra la zafra récord que proyectó la cartera agropecuaria nacional. Aún así, las nuevas cifras difundidas por la Secretaría mantienen la perspectiva de una cosecha récord.