Emir Kusturica y su banda No Smoking se presenta hoy en la Argentina, en La Trastienda, de Buenos Aires, y también mañana y el próximo fin de semana. El grupo del cineasta ofrecerá además funciones en Mar del Plata y Córdoba durante la semana, y hay probabilidades de que en breve se estrene en Rosario el documental que rodó sobre una gira de su banda titulado "Super 8 Stories". No Smoking, que se dio a conocer internacionalmente tras componer la música de "Gato negro, gato blanco" (1997), hace una música mestiza, mezcla de rock and roll, jazz y sonidos gitanos, con alguna influencia asiática, sin dejar de lado el aspecto político en las letras. "La música que intentamos tocar es la respuesta adecuada a lo que se ve allá (en los Balcanes), a todo ese absurdo. Una de las armas más importantes de los eslavos es el humor negro", sostuvo el realizador, que define a la banda actualmente con un sonrisa: "Lo nuestro es un circo ambulante que intenta hacer feliz a la gente". No Smoking se fundó en Sarajevo, ciudad en la que nació Kusturica en 1954, como reacción al movimiento punk. En lo s 80 revolucionaron la forma de hacer música en la entonces Yugoslavia. Kusturica se incorporó al grupo en 1986. Nele Karajlic, cantante y líder de la banda, señaló que Kusturica "como músico actúa como director, y como director, como músico. Todas sus películas tienen una estructura musical. Las primeras son canciones de rock, y Underground es una sinfonía". "Para nosotros fue bueno que pensara como director de cine, porque antes nuestras canciones duraban diez minutos y ahora sólo cuatro o cinco", bromeó el cantante. Desde 1994, Stribor, hijo de Kusturica, toca la batería en el grupo, y la relación entre padre e hijo es casi como una historia aparte dentro del filme. "Desde que tocamos juntos estamos más unidos que nunca", afirmó el realizador. Cuando se le preguntó si "Buena Vista Social Club", de Wim Wenders, había tenido alguna influencia en "Super 8 Stories", dijo: "Hay una esencia compartida entre la música cubana y la que hacemos nosotros por la forma en que se preservan. Pero estéticamente las películas son muy diferentes". Sobre su faceta de actor, en la que logró gran reconocimiento recientemente con "Pasión de amor", de Patrice Leconte, se manifestó algo avergonzado. "Me siento mejor dirigiendo y haciendo música. La tarea de actuar me parece la más difícil de todas", aseguró. Kusturica ganó el León de Oro en Venecia en 1981 por "Siecas li se Doli Bell". En 1993 obtuvo en la Berlinale un Oso de Plata por "Sueños de Arizona". Recibió dos veces la Palma de Oro en Cannes al mejor director: en 1985, por "Papá está en viaje de negocios", y en 1995, por "Underground". En cuanto a los atentados y la guerra que sacuden por estos días al mundo, el cineasta reflexionó que la industria cinematográfica de Hollywood ha sido "escuela" para los terroristas. "Siempre me ha movido la tragedia humana, pero no me interesan los avatares políticos. Me conmueven por igual la gente pidiendo ayuda con pañuelos desde el World Trade Center y los afectados por los bombardeos en Afganistán", dijo. En sus conciertos en Chile el creador y su particular banda ofrecieron un espectáculo casi mágico con la misma fórmula que usa en sus filmse, mezclando histriónicas coreografías con rutinas circenses. Según destacó la prensa chilena, la banda ofreció "una fiesta loca" que logró cristalizar de manera única un cúmulo de influencias estilísticas, que varían desde un temprano jazz y marchas turcas a clásicos italianos, trompetas gitana y ska unidos a una actitud "decididamente punk". En el Teatro Municipal de Viña del Mar, el guitarrista y su banda presentaron lo mejor de su último disco "Unza Unza Time", y temas de la banda sonora de sus filmes "Underground" y "Gato negro, gato blanco". En la semana Kusturica actuará en Córdoba el martes y en Mar del Plata el jueves. En Buenos Aires se volverá a presentar el próximo fin de semana en dos funciones que debieron agregarse por la gran demanda de entradas que suscitó la presentación del cineasta en su función de músico. En tanto el documental que filmó Kusturica sobre su banda, aún no fue confirmado por las salas de cine rosarinas y su estreno antes o después de la exhibición en Buenos Aires dependerá de la cantidad de copias de la película que haya en el país. "Super 8 stories" repasa en una hora y media los recuerdos de los integrantes de la banda en su última gira que duró un año y medio.
| Kusturica entró en 1986, pero la banda tiene 20 años. | | Ampliar Foto | | |
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