El tesorero de Rosario Central, Jorge Sauan, fue perseguido y estuvo a punto de ser agredido anoche por un grupo de matones a sueldo, aparentemente enviados por el sector de la comisión directiva enfrentado con el grupo que lidera este dirigente, según confiaron fuentes del riñón canalla a Ovacion. La agitada reunión de la comisión directiva en la sede del club concluyó en forma abrupta, cuando el tesorero dio por terminada la enésima discusión con el presidente Víctor Vesco y se retiró del club. Sauan subió rápidamente a su auto y se retiró hacia sus oficinas céntricas, aunque fue perseguido por otro vehículo, en el que iban tres patas de plomo, quienes intentaron agredirlo frente a su cochera, aunque la rápida y oportuna intervención de sus custodios evitó que la situación pasara a mayores, motivo por el cual los matones se escaparon, sin que nadie pudiera contestar la pregunta del millón: ¿el presidente Vesco será el autor intelectual de este cobarde conato de agresión?
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