Marcelo Carné
Más relajado, aunque exhibiendo aún signos de cansancio después del intenso trajín de la campaña electoral, Julio Gutiérrez recibió a La Capital en su domicilio del barrio sur de la ciudad de Santa Fe, a veinticuatro horas del triunfo electoral que lo catapultó a una banca en la Cámara de Diputados de la Nación. "Creo que si el peronismo se aglutina detrás de un candidato fuerte en Rosario y ofrece una propuesta clara, tiene buenas chances de obtener la Intendencia en el 2003", confiesa Gutiérrez a modo de vaticinio y con los ecos de los festejos de sus compañeros del sur provincial aún zumbándole en los oídos. Fiel a su estilo mesurado, pero sin renegar de su profesión de fe reutemista, el legislador sostiene que "la situación de Reutemann no ha variado con esta elección, porque no participó ni se involucró en esta campaña", aunque deja en claro que las posibilidades presidenciales del Lole permanecen intactas: "No hay dudas de que Reutemann sigue siendo un dirigente importante, un dirigente creíble y con muy buenas chances de disputar la Presidencia en el 2003". -A 24 horas de las elecciones y con los números en la mano, ¿ya ha trazado un balance más frío del resultado electoral en Santa Fe? -En términos cuantitativos ha sido una elección importante para el justicialismo santafesino, ya que hemos obtenido dos senadores y cuatro diputados nacionales, es decir que de 12 cargos en disputa el PJ se lleva seis. Además, en el caso de diputados, con una performance que hacía varias elecciones no tenía el justicialismo en la provincia. Y si bien ganamos en toda la provincia y en números porcentuales hemos incrementado nuestro caudal de votos, tampoco perdemos de vista que hemos mermado en la cantidad total de sufragios por este fenómeno del famoso voto bronca que hizo bajar el número de votantes no sólo al PJ, sino al resto de los partidos. -¿Le sorprende que Santa Fe haya estado al tope nacional en la sumatoria de votos en blanco y nulos? -Debo reconocer que sí. Está claro que esta fue una elección muy corta y muy fría y además se votó en el peor de los escenarios por la situación económica y social. Indudablemente, hay un porcentaje mayoritario de votantes arrepentidos que habían apoyado a la Alianza en las elecciones de 1999. Aunque hay que reconocer que también hubo menos votos positivos para el justicialismo en relación con aquella elección. Se trata de un mensaje a toda la dirigencia política por no haber dado las respuestas a las expectativas de la gente. -¿Lo sorprendió el triunfo del justicialismo en Rosario? -Ha sido una sorpresa porque el PJ no gobierna Rosario desde al año 1976. Indudablemente al desgaste de la gestión (del intendente, Hermes) Binner se sumó una oferta electoral del justicialismo a concejales que tuvo buena recepción y un buen trabajo de la militancia en las distintas seccionales que ha provocado este resurgir del peronismo rosarino. Creo que si el peronismo se aglutina detrás de un candidato fuerte y ofrece una propuesta clara tiene buenas chances de obtener la Intendencia de Rosario en el 2003. -¿Cómo lo reposiciona a Reutemann el resultado electoral del domingo? -Creo que su situación no ha variado con esta elección, porque Reutemann no participó ni se involucró en esta campaña. El mismo dijo que la responsabilidad iba a recaer en los propios candidatos y en la militancia del justicialismo. Por supuesto que no le debe resultar grato este grado de abstención de la gente, pero de todos modos no hay dudas de que Reutemann sigue siendo un dirigente importante, un dirigente creíble y con muy buenas chances de disputar la Presidencia en el 2003. -¿Cómo conjugará el justicialismo su rol de principal partido de oposición con mayoría parlamentaria en las dos Cámaras del Congreso? -El PJ va a tener la gran responsabilidad que le dio el electorado de ejercer la mayoría en ambas Cámaras y creo que el justicialismo ya ha demostrado una gran madurez en el sentido de acompañar muchas medidas del gobierno nacional, aun no estando de acuerdo, para garantizar la gobernabilidad.
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