Desvincularon a un futbolista de una causa por homicidio

El jugador Guillermo Larrosa estaba acusado por encubrimiento en la muerte de Hugo "Sapo" Taborda

El jugador de Gimnasia y Esgrima de La Plata Guillermo Larrosa fue desvinculado definitivamente de la causa en la que estaba imputado de encubrir a uno de los procesados por el crimen del barrabrava de Central Hugo Sapo Taborda. El futbolista había sido acusado de ocultar en su casaquinta de Pueblo Esther a un hombre buscado por la policía como supuesto autor del asesinato, pero fue sobreseído al comprobarse que no tuvo participación en el hecho.
Larrosa estaba sospechado de brindar alojamiento en su casa de fin de semana a su cuñado Luciano César, uno de los imputados en el crimen de Taborda ocurrido el 8 de junio del año pasado en Presidente Quintana y Esmeralda. La víctima había llegado hasta ese lugar a bordo de un Fiat Regatta de su propiedad y fue fusilado de tres balazos a muy corta distancia efectuados con dos armas de distinto calibre.
Por el homicidio fueron procesados César, de 40 años, y Oscar Angel Ibáñez, de 29. Los acusados dieron dos versiones distintas del episodio: Ibáñez dijo que oyó los disparos desde el interior de la casa César, situada a metros del lugar del crimen, mientras que César argumentó haber disparado en legítima defensa.
Luego de permanecer unos 20 días prófugo, César fue localizado y detenido en una vivienda de Bolívar y Palestina de Pueblo Esther, que es propiedad del futbolista. Por ese motivo, Larrosa fue sospechado de haber brindado alojamiento a César para ocultarlo de la policía.
Pero el juez de Instrucción Nº 7, Eduardo Suárez Romero, consideró que la mera circunstancia de ser el dueño de la propiedad era "insuficiente" para considerar que el jugador cometió encubrimiento. Además, según consta en la resolución judicial, esa no era la vivienda permanente de Larrosa, que está radicado en la ciudad de La Plata.
En su declaración, el futbolista manifestó que recién dos días después de la detención de César supo que su cuñado se había alojado en su casa de Pueblo Esther. Larrosa aseguró que sólo viaja a Rosario una vez al mes y que, en la última oportunidad, entregó las llaves de la vivienda a su suegra para que realizara reparaciones. De todos modos, la madre de César no fue acusada de encubrimiento porque está eximida de ese delito debido a su relación de parentesco con el imputado.
El crimen de Taborda derivó en un tiroteo en los pasillos de Tribunales el año pasado, cuando los hermanos de Taborda se enfrentaron con los familiares y el abogado de Luciano César, mientras se realizaba un careo entre los imputados.

Los asesinos habrían estado en la casa de Larrosa.