Gestos adustos. Cabezas gachas. Los rostros de los jugadores de Argentino no merecen mayores comentarios. En cambio, el técnico José Machetti tomó la derrota con mayor sabiduría y optó por desechar la palabra inmerecido. "Se puede decir que el resultado es inmerecido pero no sirve de nada. El fútbol tiene estas cosas. Cuando un equipo como Flandria viene con una racha ganadora es posible ganar esta clase de partidos". A Machetti le importó valorar más la actitud del equipo, y reiteró que siguen buscando las alternativas ofensivas para llegar con mayor peligro. "Buscar variantes no es fácil ni se consigue de un día para el otro. Ni siquiera pasa por si ponemos uno o dos delanteros. Hoy cambiamos y jugamos con una línea de tres en el fondo y cinco en el medio. Más allá de la derrota, me quedé conforme con el rendimiento del equipo y con el sistema que empleamos". Las dos derrotas consecutivas de local fueron un golpe duro, teniendo en cuenta que en esa condición y por su bajo promedio debe sumar sí o sí. Pero Machetti fue cauto: "Hay que seguir trabajando. Todavía falta mucho y no hay nada perdido". En el vestuario visitante, el entrenador Omar Santorelli fue realista. "Jugamos mal, nos faltó volumen de juego y prácticamente no llegamos. Pero esto es así, acertamos una y nos llevamos los tres puntos".
| |