A la propuesta futbolística más impactante del año le faltaba una respuesta. El candidato a presidente de River Plate Hugo Santilli tiró la semana pasada: "Me encantaría tener en el equipo a Juan Román Riquelme. La cuestión es lograr los sponsors que le paguen un muy buen contrato".
La respuesta llegó ayer..."No podría traicionar a la gente de Boca, ni en pedo", textual de Riquelme.
"Yo soy hincha de Boca y no podría jugar en River por más plata que hubiera. Me sorprendió mucho lo del señor Santilli. El debe ser muy fanático de River y jamás podría postularse a presidente de Boca. Con ese ejemplo le pido que entienda mi posición", explicó Riquelme, que aprovechó la situación y le pegó, tal su costumbre, al titular de Boca, Mauricio Macri.
"No me hace bien escuchar que haya gente de River pensando en cómo el día de mañana podría pagarme un contrato, mientras que el presidente de mi club jamás me ha llamado para renovar el contrato. Eso no me cae para nada bien", señaló el volante del conjunto de Carlos Bianchi, quien en ningún momento se refirió a Macri por su nombre o su apellido.
En declaraciones al programa "Siga, siga..." de radio Nacional, Riquelme fue más allá en sus críticas hacia Macri.
"He escuchado al presidente decir muchas cosas sobre mi persona y mi contrato por radio, en los diarios y hasta por Internet, pero jamás me llamó. Lamentablemente ya estoy acostumbrado. Estoy bastante cansado de hablar de este tema", señaló Riquelme, quien en ese mismo instante optó por finalizar el tema.
Enseguida, el motor futbolístico de Boca comenzó a hablar del objetivo de este semestre, la Copa Intercontinental que el equipo intentará ganar el 27 de noviembre, ante el Bayern Munich alemán, por segunda vez consecutiva.
"Para pensar en el Bayern hay que mejorar mucho en el torneo local. Para llegar con posibilidades debemos mejorar muchísimo. Sabemos que si no lo hacemos tendremos pocas chances", dijo.
Pero Riquelme señaló que él es optimista ya que "si se mantiene la tendencia de los últimos partidos llegaremos bien a jugar con el Bayern. Con las chances intactas. Si íbamos a Tokio como arrancamos el Apertura, perdíamos seguro", dijo con crudeza.
Tras ello, Riquelme opinó sobre las razones del mal comienzo de Boca en el Apertura.
"Creo que las razones de ese bajón o falta de resultados pasó porque los muchachos no se conocían tanto, Boca cambio la defensa entera algo que hasta ahora no había ocurrido. Una cosa es mechar un volante o un delantero, otra muy diferente la defensa, que es la línea que necesita más coordinación en el juego", analizó el jugador.
Por último, Riquelme les dio otro "palito" a los dirigentes, esta vez por el tema Bianchi.
"Carlos es el mejor técnico del mundo, los jugadores tenemos la suerte de que nos dirija. Los directivos parece que no se dieron cuenta", finalizó con un dejo de ironía. (DyN)
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La idea de Hugo Santilli no encontró eco en Riquelme. |  | Ampliar Foto |  | |
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La Ciudad
