La automotriz de capitales norteamericanos General Motors invertirá 100 millones de dólares durante los próximos dos años para desarrollar nuevos modelos en su planta de Rosario. Así lo anunció el vicepresidente internacional de la compañía, Frederick Henderson, quien además desalentó versiones circulantes durante los últimos días que daban cuenta de la salida de la marca del chivo de la producción de autos en Argentina.
En declaraciones a la agencia de noticias Reuters, Henderson había descartado la posibilidad de levantar las instalaciones de Alvear. "Nosotros ya salimos de ese mercado en 1978 y volvimos en 1994; no podemos salir más de una vez porque será difícil regresar después", señaló.
Por su parte, el director de relaciones institucionales de la GM de Argentina, Alberto García Carmona, dijo también en declaraciones a Reuters que el grueso de la inversión se destinará a desarrollar un nuevo modelo pero aclaró que no se discontinuará la producción del Corsa, el estandarte del complejo Rosario. Sin agregar mayores detalles, García Carmona aseguró que se trata de un producto de gama baja y comenzará a fabricarse hacia mediados del año próximo.
La noticia es un hecho excepcional para el mercado automotriz argentino, afectado por una fuerte y constante caída en las ventas que ha obligado a las empresas del sector a aplicar suspensiones y recortar su plantilla para subsanar pérdidas. La propia GM no pudo escapar a esa tendencia y en marzo último promovió un plan de retiros entre sus trabajadores, que le permitió reducir en un centenar de puestos la plantilla del Complejo Rosario.
La planta emplea a unas 1.100 personas en forma directa e indirecta y tiene una capacidad de producción de 89.000 vehículos al año."Sabemos que este momento es bastante difícil pero tenemos una visión optimista a largo plazo", dijo García Carmona.
La coyuntura económica impone a la GM la existencia de un mercado de consumo muy deprimido, pero en la compañía entienden que una vez superada la crisis financiera el mercado se recuperará, por la existencia de una demanda contenida.
El aporte forma parte de un plan de capitalización a dos años destinado a mejorar las cadenas de producción de la empresa. "Esto es parte de un proceso de inversión por 1.000 millones de dólares que inició la compañía en 1994", dijo García Carmona. "Una inversión como la de Rosario es para ser desarrollada y pueda dar sus frutos. Es una de las plantas más modernas que tiene GM en el mundo".
El ejecutivo se negó a mencionar qué nuevos modelos fabricarán en el establecimiento, donde ya ensamblan dos vehículos medianos y un utilitario.
GM Argentina exporta además varios modelos a México, Brasil y Chile. La compañía facturó en Argentina en el 2000 unos 600 millones de dólares, cifra que espera mantener este año."Esperamos una facturación similar para este año, no vamos a tener una caída importante a pesar del escenario económico", dijo el ejecutivo.
Un escenario complicado
La producción nacional de automóviles cayó 37,4 %en agosto respecto del mismo mes de 2000, en tanto que las ventas a concesionarios bajaron un 41,5 por ciento, según cifras de la Asociación de Fábricas de Automotores (Adefa).
La mayor parte de las terminales y autopartistas han aplicado planes de suspensión para sacar sus balances del rojo, en tanto que otras retiraron sus inversiones del país, sacudidas por el estancamiento de la economía que ya lleva tres años.
La Ciudad
