| | cartas ¿Quiénes nos podrán salvar?
| Soy jubilado bancario. Trabajé 40 años como tal. Aporté de mis remuneraciones lo que el gobierno determinó, para una digna jubilación. Cuando me jubilé en 1990 me asignaron una retribución como pasivo, el porcentaje que determinó el monto por ley, retribución que aseguraría mi vejez. Los aportes fueron míos y del patrón, exclusivamente ganados por servicios prestados y entregados al Estado para su administración. ¿Con qué derecho el Estado efectúa una poda del 13 por ciento, cuando el cobro mensual de mi jubilación es un retorno de lo que aporté con mi esfuerzo? La Justicia Federal recientemente hizo lugar a recursos de amparo presentados por diez jubilados de Rosario. Determinó la jueza federal Nº 6 de Capital Federal hacer lugar y ordenó al estado nacional abstenerse de aplicar reducciones. Existen otras 490 presentaciones hasta ahora. ¿No tendría el Estado que dar marcha atrás a esta poda que castiga a los jubilados? La injusticia se repite en el año 2001. Ansés dedujo anteriormente de mis cobros mensuales impuestos a las ganancias. ¿Qué ganancia es la jubilación, si son mis propios fondos? En el presente, continúan deduciéndome el impuesto a las ganancias. Pero en el mes de junio el gobierno nacional anunció el desembolso de los descuentos para este año, retroactivo a enero y realizar la devolución durante el mes de agosto. Aceptó así retenciones indebidas para alrededor de 500 mil personas. Una nueva injusticia. No se efectúa el citado desembolso hasta el 2002. ¿Quiénes nos podrán salvar? Yo sé, los funcionarios honorables y no los insensibles políticos economistas. Será justicia. LE: 5.975.445
| |
|
|
|
|
|
Diario La Capital todos los derechos reservados
|
|
|