Torneo Molinas: Botafogo no logra salir del fondo

Igualó como local 1 a 1 ante Juan XXIII y, de terminar el torneo ahora, estaría perdiendo la categoría

Mariano Bereznicki

No pudo ganar pero al menos le quedó el único consuelo de que por lo menos no perdió. El presente no es para nada bueno y de seguir así, el futuro pinta bastante oscuro. Por ahora, el descenso sigue acosando a Botafogo, que igualó ante otro menos necesitado, Juan XXIII, 1 a 1. El equipo naranja de Granadero Baigorria demostró en algunos pasajes del partido que luchará hasta el final para evitar jugar la próxima temporada en la segunda división de la Rosarina.
Duelo de necesitados. Dos equipos que tendrán que sumar la mayor cantidad de puntos para zafar del descenso, aunque de los dos, Botafogo es el que más está comprometido está con la zona caliente.
Los locales dejaron sentado sobre el castigado campo de juego que hicieron méritos suficientes para quedarse con la victoria. Pero lo que también es verdad es que fueron tan imprecisos como su rival, sobre todo en la última línea.
Botafogo fue un equipo muy desordenado cuando defendía y bastante intermitente cuando atacaba. Por su parte, la visita realizó un ordenado trabajo, más que nada en mitad de cancha.
Guiados por Luis Gómez, los locales hicieron un buen segundo tiempo comparado con la mediocre imagen que dejaron en la parte inicial. Sólo les faltó mejor puntería cuando estuvieron frente a Tomasini, quien evitó en varias ocasiones la caída de su valla.
A poco de concluir la primera etapa, un potente latigazo de Martín Arcodía puso en ventaja a la visita, que ya había avisado en dos ocasiones que en cualquier momento abría la cuenta.
Pero en medio de la tremenda desesperación por culpa del fantasma del descenso que sigue vigente, el volante Enrique García estampó el empate. En ambos goles, las defensas tuvieron mucho que ver.
En la segunda etapa, conducidos por el hábil Luis Gómez, Botafogo intentó llevarse por delante a su rival. Pero como el pibe estuvo muy solo a la hora de la creación, los locales se vieron privados de marcar el segundo.
Por su parte, la jugada más clara que mostró la visita en el complemento fue un cabezazo de Aráoz que Del Fabro alcanzó a mandar al córner. Ya no había más tiempo, parecía que el empate estaba sentenciado de antemano.