El juez federal Gabriel Cavallo ordenó ayer la detención con fines de extradición a España del ex juez federal de Santa Fe Víctor Brusa, de otros cinco ex represores santafesinos y de numerosos ex oficiales de la Marina y miembros de Prefectura que operaron en la Escuela de Mecánica de la Armada (Esma). En Santa Fe se aguardaba, al cierre de esta edición, el arribo del exhorto de Cavallo para detener a Brusa; al ex comisario Mario Fasino; al ex subjefe de Drogas Peligrosas Héctor Romeo Colombini; al ex comisario Juan Calixto Perizzotti; a María Eva Aevis, y a Eduardo Alberto Ramos, ex empleado de la Municipalidad de Santa Fe (ver aparte).
La decisión de Cavallo responde al pedido formulado por el juez español Baltasar Garzón, quien libró orden de captura contra los citados así como otros militares y policías acusados de haber participado en la represión ilegal durante la última dictadura militar.
Una vez que estén bajo arresto, Garzón deberá hacer formalmente el pedido de extradición ante el gobierno argentino, y éste decidirá si concede o no el mismo. Se presume que la administración delarruista adoptará la misma posición que en el caso del pedido de extradición de Alfredo Astiz por Italia. El gobierno recurrió entonces al principio de "territorialidad".
El exhorto tiene que ser recibido por el juez federal santafesino Eduardo Tejerina quien, a su vez, deberá impartir las órdenes de arresto al delegado de la Policía Federal. No obstante, de recibir sólo un exhorto y no varios, el magistrado presumiblemente se excuse de atender el caso y lo transfiera al juez subrogante Audelino González Suárez, por su manifiesta relación de amistad con Brusa.
Precisamente por este último motivo González Suárez debe considerar el pedido de hábeas corpus elevado por el defensor del ex juez, su hermano Horacio Brusa, a fin de que no se tome en cuenta la solicitud del magistrado hispano y se le asegure a Víctor Hermes Brusa la libertad ambulatoria.
Es factible que el juez subrogante se expida hoy en relación al pedido de hábeas corpus que ha sido girado a la Fiscalía para su análisis.
Sin noticias en el juzgado
Ayer en el Juzgado Federal de Santa Fe no se tuvieron noticias sobre el pedido del juez Cavallo, salvo los trascendidos periodísticos, y hasta donde pudo saberse tampoco las tuvieron los afectados por la medida. Brusa no formuló declaraciones al periodismo y la mayor parte del tiempo la pasó en su domicilio de calle 9 de Julio al 1700, de la ciudad de Santa Fe.
Sus allegados le dijeron a La Capital que se encontraba de buen ánimo y que, como lo hace habitualmente, había concurrido a un gimnasio propiedad de un familiar. Brusa y su hermano aguardan con mucha expectativa la resolución que se tome respecto del hábeas corpus presentado.
En tanto, el ex subcomisario Mario Facino se encontraba ayer en su casa de la comuna costera de San José del Rincón, donde se postula nuevamente como candidato a presidente comunal (cargo que ya ocupara) por un sublema justicialista para las elecciones del próximo 14 de octubre.
Respecto de las imputaciones que se le formulan, Facino sostuvo a La Capital que se trata de "una gran mentira, una campaña planificada, montada por gente de izquierda como esa profesional de la difamación que es Patricia Isasa o la ex diputada nacional Elsa Combes". Afirmó que "jamás" había hecho algo al margen de la ley. "Pasa que no toleran que un comisario haya triunfado en la política", afirmó.
Facino manifestó que se pondrá a disposición de la Justicia pero que no reconoce autoridad al juez español Baltasar Garzón, "quien actúa como quiere, sin respetar el principio de territorialidad".
En tanto, la ex detenida-desaparecida Patricia Isasa -quien ha denunciado ante Garzón a la totalidad de los imputados- manifestó desde Buenos Aires, donde reside, que se encontraba "muy contenta" por la medida tomada por Cavallo. "La justicia alivia", fue la frase que eligió Isasa para describir su estado de ánimo.