Cañada de Gómez.- Los policías del departamento Investigaciones de la Unidad Regional X, Daniel Sacco y Ramón Giménez, no habrían provocado el incendio que terminó con la vida del detenido José Manna, que estaba alojado en una celda de la alcaidía de la Unidad Regional X, según un fallo del juzgado de instrucción en lo penal de esta ciudad a cargo de la jueza Ana María Bardone.
A esta conclusión llegó el juzgado del Distrito Judicial Nº 6 luego del inicio de una investigación que incluyó a medio centenar de testimonios tomados como consecuencia de la presentación de una denuncia por parte de los familiares del fallecido. Los denunciantes acusaron a dos policías de la jefatura local "de haber provocado un incendio en la celda en la que estaba alojado Manna".
"No hemos acreditado la presencia de los policías Sacco y Giménez en momentos en que Manna ingresa a la jefatura y durante su permanencia en la alcaidía. Testigos consultados que presenciaron el episodio no observaron a ninguna persona en momentos en que se registra el incendio", dictaminó la jueza cañadense.
Bardone decidió pasar a archivo las actuaciones realizadas al no hallar elementos suficientes a los fines de presumir la comisión de un ilícito por parte del personal policial denunciado. "Tuvimos testimonios claves que estaban en el único ingreso a la celda y no hubo ni siquiera una sospecha", explicó a este diario el secretario de instrucción, Rodolfo Zvala.
La investigación determinó que en el pantalón de Manna fue hallado un encendedor (lo que según la jueza Bardone indica que él mismo habría originado el incendio) y hay un testimonio clave de una profesional del Hospital Clemente Alvarez que no autorizó a que le tomen declaración testimonial los días 6 y 7 "porque el estado de sedación no daba seguridad a los dichos del detenido".
"Ningún médico ni enfermero del servicio de emergencia, del hospital y en el centro de salud de Rosario escucharon decir que alguien le había prendido fuego. No existen elementos para sospechar la existencia de un delito", dijo Zvala.
Los testimonios recogidos en el marco de la investigación pertenecen a detenidos que estaban alojados en la misma alcaidía, visitantes, médicos, personal policial y de enfermería que asistió a Manna en un primer momento.
Manna había sido detenido in fraganti cuando se llevaba cortes de carne fresca y otros elementos de valor de una carnicería y despensa. Dos horas después de la detención se originó un incendio en la celda en la que estaba detenido.
Piden otra investigación
La resolución de Bardone fue objetada por los familiares de la víctima y por la abogada defensora, Matilde Bruera, quien anticipó que pedirá el reinicio de la causa. "No es posible que el expediente haya estado siempre bajo secreto de sumario y llama la atención la celeridad con la que han cerrado la investigación", dijo ayer la abogada en Cañada de Gómez.
José Manna falleció luego de haber sido derivado al Hospital Clemente Alvarez, con quemaduras de segundo y tercer grado. La versión de los familiares de Manna es que dos policías de la Agrupación Unidades Especiales (AUE) iniciaron el fuego.
"Mi sobrino nos dijo claramente cuando estaba internado: «Tío, andá a denunciar que dos policías nos prendieron fuego»", dijo Julio Manna.
Familiares de José Manna realizaron varias marchas de silencio por las calles de Cañada de Gómez. Según se anticipó, la abogada defensora pedirá una nueva autopsia.