Año CXXXIV
 Nº 49.237
Rosario,
miércoles  12 de
septiembre de 2001
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El Senado absolvió al juez Oyarbide en el juicio político
El magistrado era acusado por enriquecimiento ilícito, mal desempeño y amenazas. El peronismo impuso su voto

El Senado constituido en tribunal de juicio político absolvió ayer al juez federal Norberto Oyarbide quien estaba acusado de mal desempeño en el ejercicio de sus funciones, amenazas, enriquecimiento ilícito y cohecho agravado. El mayoritario bloque justicialista votó a favor de la absolución del juez, mientras que el radicalismo y algunos representantes de partidos provinciales lo hicieron en contra de su continuidad como magistrado.
La votación fue ganada (21 a 20) por quienes pretendían condenar al juez, pero finalmente prevaleció la posición del PJ porque para destituir a un juez es necesario contar con los dos tercios de los votos de los miembros presentes al momento de votar.
Los radicales perdieron en su postura pese a que contaron con el apoyo de los peronistas José Carbonell (Tucumán), Osvaldo Sala (Chubut) y Beatriz Raijer (Córdoba). El cargo que finalmente sintetizó todos las acusaciones que pesaban sobre Oyarbide y por el que el justicialismo no lo encontró responsable habla de "mal desempeño por actitudes y omisiones incompatibles con el decoro y la insospechabilidad de conductas exigibles a todo magistrado judicial".
Oyarbide fue suspendido como juez en mayo de 1998 tras haber sido denunciado ante la Justicia por amenazar de muerte al recepcionista de un restaurante y por ordenar un supuesto atentado contra Luciano Garbellano, que trabajaba en el prostíbulo masculino Spartacus, donde presuntamente había sido filmado.
Los cargos que se sintetizaron en uno, fueron seis. Fue imputado por haber incurrido en falta de ética en violación al reglamento de la Justicia nacional al concurrir en varias ocasiones al local sito en Agüero 1916, de la Capital Federal, que funciona con el nombre de Spartacus, comprometiendo la dignidad que su investidura conlleva. Otro cargo fue por haber incurrido en inconductas en su vida privada que lo colocaron en una situación de extrema vulnerabilidad, que permitieron hacerlo víctima del delito de extorsión, comprometiendo el decoro en la prestación del servicio de justicia. También se lo acusó de haber omitido denunciar la comisión de delito de promoción y facilitación de la prostitución, no denunciar la comisión del tráfico de influencias del que se valía Luciano Garbellano haciéndose pasar por familiar suyo para obtener distintos beneficios.
Además fue acusado de incurrir en enriquecimiento ilícito por sobrepasar en exceso los gastos efectuados por distintos conceptos, en relación a los ingresos percibidos por su función, durante el período enero de 1996 y julio de 1998. Otros de los presuntos delitos denunciado contra Oyarbide fue el haber incurrido en presuntas amenazas (al menos amenazas simples) en relación a los hechos acaecidos el 25 de abril de 1998 en el restaurante de la calle Posadas 1032 contra el señor Zinneddine Rachem. (Télam)



Norberto Oyarbide estaba acusado de varios delitos.
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