Los fantasmas volvieron a sobrevolar la obra del puente a Victoria. La concesionaria Puentes del Litoral admitió que el proyecto padece una "grave situación económico-financiera" que puede desembocar en "la paralización de las tareas" y la suspensión o despido de sus empleados. Por el momento, ya ha provocado el "cese del abastecimiento de insumos" por deudas a proveedores y contratistas y la interrupción de "distintos frentes de trabajo".
El motivo es la suspensión del crédito otorgado a la firma por parte del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) frente al incumplimiento de los plazos de pagos pactados por la Nación en materia de aportes, según los privados. Este cuadro de situación ya fue informado a las autoridades nacionales y de ambas provincias, incluso a las respectivas carteras laborales, a través de diferentes notas.
Desde Santa Fe se intentará una gestión ante la banca internacional. En Entre Ríos están muy enojados y en alerta, creen que se trata de "una maniobra de la empresa para renegociar el contrato", según denunció ayer el secretario de Trabajo de esa provincia, Hugo Reyes.
Hasta ayer no hubo despidos ni suspensiones. Tampoco se detuvo el trabajo. El secretario gremial de la Unión Obrera de la Construcción, José Bilotta, aseguró que los responsables de la empresa le transmitieron tranquilidad para los 750 empleados directos que hay en ambos obradores y los 230 operarios de las firmas contratistas. Desde la oficina local del Organo de Control de Concesiones Viales (Occovi), se remarcó que la jornada laboral fue "normal".
No obstante, las notas que envió la empresa describiendo la realidad -a las que tuvo acceso La Capital- causaron preocupación y alerta en ambas costas del río. Ayer, el secretario de Trabajo santafesino, Oscar Ercoli, recibió a su par entrerriano para evaluar la situación. Y en el Concejo Municipal de Rosario se presentó un pedido de declaración en relación al tema.
La conexión vial siempre estuvo signada por los vaivenes económicos, ya sea por los recortes o la falta de aportes del Estado Nacional, o por la cuestión del financiamiento externo para la empresa. Esta vez, la recesión y la crisis de confianza de los mercados contribuyeron a oscurecer el panorama del proyecto. Ya la empresa había planteado la caída en el número promedio de vehículos/día que pasarían por la ruta, que bajó de 3.100 a 2.790 autos según su último estudio.
La obra está construida en un 80% y en el Occovi creen que se puede terminar cinco meses antes de septiembre del 2002, como lo exige el contrato. Pero la concesionaria siempre dijo que se podría inaugurar en junio.
Todos están enterados
Puentes del Litoral comunicó la "muy difícil coyuntura" al jefe de Gabinete de la Nación, Chrystian Colombo; a los ministros de Economía e Infraestructura, Domingo Cavallo y Carlos Bastos; y a los gobernadores Carlos Reutemann y Sergio Montiel; entre otras autoridades.
En el escrito, la firma adujo que el BID le bajó en 40 millones de dólares el monto del crédito a otorgar debido a "los resultados negativos del estudio de tránsito". Y cree que con la actual coyuntura económica tendrá una "nueva reducción". La empresa debe aportar 143 millones de pesos y el crédito solicitado alcanzaría a los 100 millones.
La firma agregó que "los plazos de pagos pactados no han sido respetados", lo que derivó en la "suspensión" del préstamo del BID debido a que al 1º de marzo de 2001 no se había cobrado "el 90% del subsidio", y porque, según la empresa, esa es la condición "imprescindible para el primer reembolso y cuya frustración causó el decaimiento del crédito".
El Estado nacional debe aportar 214 millones de pesos. Hace nueve días autorizó una partida de 27,5 millones que debía pagar por la construcción del cuarto carril del puente principal y todavía le resta abonar 7 millones. Ahora bien, "la Nación debería haber desembolsado el 100% del subsidio estatal antes de marzo pasado y no cumplió", apuntó el secretario de Obras Públicas santafesino, Carlos Borra. Las provincias, en tanto, ya cumplieron con sus obligaciones de aportar 10 millones cada una.
En la Nación están convencidos de que la empresa es "la que debe poner ahora la plata", ya que los compromisos del poder concedente "fueron casi cumplidos". El secretario de Trabajo de Entre Ríos afirmó que con este planteo "la empresa presiona para renegociar el contrato".
En Puentes del Litoral ya desde la semana pasada optaron por el silencio.
La incertidumbre por el futuro de la obra llegó a los gobernadores. Borra dijo que la provincia "solicitará los antecedentes al Occovi y gestionará ante el BID el otorgamiento del crédito para que no se paralicen los trabajos".
En Rosario, el edil del Partido del Progreso Social, Héctor Ríos, pidió que el Concejo declare su preocupación sobre la situación y que inste a los gobiernos a que le hagan cumplir a la empresa lo firmado en el contrato.