Minsk. - El presidente de Bielorrusia, Alexander Lukashenko, se declaró vencedor en las elecciones presidenciales realizadas el domingo e instó ayer a la oposición a que reconozca su derrota. "Uno debe saber ganar y perder como un hombre", expresó Lukashenko al principal candidato opositor, Vladimir Goncharik. Lukashenko añadió que como presidente hará lo posible por reunir a la minoría que no lo votó con la mayoría, aunque advirtió a los opositores que deben someterse a las leyes bielorrusas. Los observadores electores de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (Osce) condenaron ayer en duros términos las supuestas violaciones del derecho electoral durante los comicios presidenciales celebrados el domingo en la ex república soviética de Bielorrusia. "Estas elecciones presidenciales no cumplieron con las normas de comicios democráticos y libres", denunció el coordinador del grupo de observadores de la Osce, Kimno Kiljunen, en Minsk. Según los resultados oficiales provisionales difundidos ayer por la Comisión Electoral Central, Lukashenko consiguió otro mandato de cinco años con el 75,62% de los votos, mientras que el líder sindical Goncharik logró el 15,39% de los sufragios. En tercer lugar quedó Serguei Gaidukievich, con el 2,5%, informó en la televisión bielorrusa la presidenta de la Comisión Electoral, Lidiya Yermoshina. A pesar de esta condena, la Osce llamó a levantar el aislamiento internacional impuesto a Bielorrusia. "La falta de democracia no debe conducir a un mayor aislamiento del pueblo bielorruso", sostuvo Kiljunen. También la oposición denunció un fraude masivo a favor de Lukhasenko, de 47 años, quien viene gobernando Bielorrusia con un estilo autoritario desde 1994. El presidente aseguró en cambio que la votación fue justa y democrática. Sólo admitió la existencia de algunas "negligencias" que no afectaron los resultados. Lukashenko ya se había proclamado vencedor en la noche del domingo. El actual mandatario bielorruso, un ex jefe de una granja colectiva, fue elegido en 1994 como líder de una plataforma anticorrupción. Dos años después disolvió el Parlamento y un año más tarde hizo aprobar modificaciones en la Constitución para extender su mandato de cuatro a siete años. (DPA)
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