Abrazo a la Rosada por la vuelta de los hijos de Arias Uriburu

De la Rúa recibió a la madre de los tres niños que fueron secuestrados por su padre y llevados a Jordania

Unos trescientos chicos de escuelas de Capital Federal y Gran Buenos Aires realizaron ayer un abrazo simbólico a la Casa de Gobierno para reclamar que los hijos de Gabriela Arias Uriburu puedan visitar la Argentina y reunirse con su madre, quien fue recibida por el presidente Fernando de la Rúa en su despacho de la sede gubernamental.
La convocatoria, bajo la consigna "un abrazo de corazones al corazón de la Casa Rosada", intenta exhortar al rey Abdullah II de Jordania para que permita que Karin, Zahira y Sharif, los tres hijos de Arias Uriburu, puedan viajar a la Argentina a partir de una invitación formal del presidente para que los chicos visiten el país.
La singular manifestación, que nació a instancias de los sobrinos de Arias Uriburu, reunió a alumnos de escuelas de la Capital Federal y el Gran Buenos Aires, además de algunas figuras del espectáculo, quienes se concentraron en la plaza de Mayo portando corazones con la foto de los tres niños y pidiendo por su "libertad". Del abrazo participó también el coro Kennedy.
Arias Uriburu señaló que "el rey es quien tiene potestad para resolver" la situación de sus hijos, pero el monarca aún no respondió la invitación, cursada en diciembre del año pasado por De la Rúa, para que los niños viajen a la Argentina.
La iniciativa presidencial obedece a "una estrategia" de la Cancillería y del propio jefe del Estado para comenzar a "sacar a mis hijos del estado de secuestro" en el que se encuentran en Jordania, explicó la madre de los chicos.
El ex marido de Arias Uriburu se llevó a sus hijos a Jordania desde Guatemala, donde residía el matrimonio, el 10 de diciembre de 1997 y, desde esa fecha, su madre inició una ardua lucha para recuperarlos ante distintos foros y organismos internacionales.
Gabriela viajó por última vez a Jordania en junio pasado, gracias a las gestiones del gobierno argentino. "Cada vez que voy a Jordania es gracias a toda una representación importante política de la Argentina para que yo pueda ver a los chicos. Yo no sé dónde viven y ellos no pueden llamarme por teléfono", contó, al describir la situación por la que atraviesa desde hace casi cuatro años, cuando fue separada por la fuerza de sus hijos.
Desde la plaza de Mayo, Arias Uriburu sostuvo que "vamos a hacer fuerzas desde este lugar donde se dio la libertad de la Argentina y exhortar al mundo y al rey de Jordania para que mis hijos puedan venir a la Argentina".
Al finalizar el abrazo, Arias Uriburu y una representación de los chicos que participaron de la manifestación fueron recibidos en la Casa de Gobierno por el jefe del Estado.
Del encuentro, que surgió espontáneamente a pedido del propio De la Rúa, participaron también el secretario de Cultura, Darío Lopérfido, y el vocero gubernamental, Juan Pablo Baylac.
Los niños que acompañaron a Arias Uriburu contaron luego a la prensa que le pidieron al presidente que "haga todo lo posible por traer a los chicos a la Argentina porque cada mamá necesita a sus hijos y los hijos necesitan de su mamá".
Antes de retirarse de la Casa Rosada, Arias Uriburu adelantó que el próximo abrazo para pedir por la vuelta de sus hijos se hará frente a la mezquita ubicada en el barrio porteño de Palermo porque "representa el símbolo del Islam". (DyN)

Alumnos de Buenos Aires apoyaron a Arias Uriburu.