La Bolsa de Buenos Aires sumó ayer una nueva caída y ya acumula seis ruedas consecutivas en retroceso. De esta forma, el panel Merval de las empresas líderes quedó en el nivel más bajo de los últimos seis años, desde que el "efecto tequila" derrumbó a los mercados del mundo. El indicador bursátil cerró en los 287,21 puntos tras una fuerte caída del 4,29 por ciento, sobre una exigua base de negocios que apenas alcanzaron un volumen de 7 millones de pesos.
Los analistas del mercado porteño insistieron en que a pesar de haberse formalizado el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), el cada vez más desfavorable panorama en las Bolsas del mundo está contribuyendo negativamente sobre el mercado local.
En relación a las dudas internas, los expertos consideran vital una rápida definición de los conflictos Nación-provincias y una reducción en el ruido político en vista a las elecciones parlamentarias. Prevén que el único tema que podría aislar al país de la negativa coyuntura externa sería la aceleración del canje de deuda.
Contrariamente a la expectativa favorable que generó la llegada de un desembolso de 6.240 millones de dólares por parte del FMI, el índice de riesgo país reflejó ayer un comportamiento neutro. Según la medición del JP Morgan, el riesgo se ubicó en 1.486 puntos básicos, después de haber tocado por la mañana un nivel máximo de 1.514 puntos.
En tanto, las tasas se volvieron a recalentar, y una prueba de ello es que el Banco Central modificó ayer las tasas de referencia para depósitos a plazo fijo en pesos a menos de 59 días, y en dólares a más de dos meses. Ahora la tasa de referencia para colocaciones en pesos de 30 a 59 días de plazo subió del 22,75 al 23,25 por ciento nominal anual, en tanto se mantiene en el 24,50 por ciento a 60 o más días.
La crisis exterior
A la delicada situación de la Argentina se suma el desfavorable contexto internacional, en donde no se avizoran posibilidades de que la desaceleración de las principales economías toquen un fin.
Frente a ese panorama existe una opinión casi generalizada de que la Reserva Federal norteamericana (FED) recortaría en otro cuarto de punto las tasas de interés e incluso algunos arriesgan que sería antes del 2 de octubre, fecha en la que se reúne el Comité de Mercado Abierto del organismo.
Entretanto, Wall Street siguió afectado por el pesimismo que generaron las altas tasas de desempleo de agosto. Con todo, el índice Dow Jones quedó neutro y el Nasdaq recuperó 0,45 por ciento.
La Bolsa de San Pablo bajó un 2,72% y acusó el impacto de la desaceleración económica en EEUU, lo que lleva a los inversores a recortar sus posiciones en los mercados emergentes. Además, el real, en su relación con el dólar se cotizó a 2,608. Esa cifra del real es la cotización más baja de la historia desde su creación en 1994.
En este contexto mundial, el FMI redujo las previsiones de crecimiento de la economía mundial para este año a 2,7 por ciento y al 3,6 por ciento para 2002.