Los dos hombres detenidos el sábado por su presunta vinculación con el crimen del empresario bonaerense Gabriel Ernesto Pellado son empleados de la planta permanente de la Municipalidad de Villa Gobernador Gálvez desde el año 1983. Sin embargo, según fuentes del vecino municipio que no supieron precisar en que reparticiones se desempeñan los hombres, los mismos no fueron contratados por el actual intendente de la ciudad, Pedro González, sino en gestiones anteriores.
Las dos personas apresadas, identificadas como el Gordo Valor y Nicanor Pereyra, están sindicados por los investigadores como aquellas personas que estuvieron con Pellado entre la noche del jueves 16 de agosto, cuando el empresario fue secuestrado, y el día de su muerte, ocurrida una semana más tarde. Pero todo indica que no son los autores materiales del crimen.
Ambos hombres están domiciliados en Villa Gobernador Gálvez y todas las miradas de la investigación están puestas en esa ciudad. Allí fue hallado el Honda Accord en el que Pellado se conducía, allí el empresario tenía las oficinas de la industria familiar que fabrica suero vacuno, allí se domicilian varias de las mujeres con la cual la víctima había tenido relaciones amorosas en sus asiduos viajes a Rosario y con una de las cuales el hombre tendría un hijo extramatrimonial y allí también apareció su cuerpo la mañana del 27 de agosto.
Una casa bajo la lupa
Como si eso fuera poco, en la ciudad que está al sur del arroyo Saladillo también está enclavada la vivienda donde Pellado estuvo secuestrado desde su rapto hasta su asesinato. Según voceros de la investigación esa casa ya estaría detectada por la investigación y habría sido allanada. Sin embargo, el secreto en el cual se maneja la pesquisa no permitió saber si el procedimiento arrojó algún resultado que echara algo más de luz sobre el episodio ni tampoco donde está ubicada la vivienda.
En otro orden, ayer el juez de Instrucción que lleva adelante el caso, Juan José Pazos, convocó a su despacho a los imputados Valor y Pereyra, aunque no trascendió si los mismos declararon ante el magistrado o se ampararon en el derecho constitucional de no hacerlo.
No obstante, se supo que ambos hombres tienen antecedentes por sus vinculaciones con homicidios cometidos fuera de la ciudad. Uno de ellos habría sido perpetrado en Casilda y el otro en Chañar Ladeado.
Asimismo, voceros de la Municipalidad de Villa Gobernador Gálvez manifestaron que "ninguno de los apresados es custodio de (el intendente) Pedro González, tal cual se hizo trascender por algunos medios, ya que el intendente no utiliza el servicio de guardaespaldas".