Año CXXXIV
 Nº 49.233
Rosario,
sábado  08 de
septiembre de 2001
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El organismo financiero dispuso un desembolso inmediato de 6.300 millones
El FMI pide más ayuda para que la Argentina salga de la "trampa"
El vocero del Fondo dijo que la reprogramación de la deuda "es un tema que compete al gobierno nacional"

El directorio del Fondo Monetario Internacional (FMI) finalmente aprobó ayer el memorandum de entendimiento con el gobierno argentino y dispuso así un desembolso inmediato de 6.300 millones de dólares, que estarán disponibles en los próximos tres días. Mediante un comunicado de prensa difundido ayer por la tarde en Washington, el organismo multilateral de crédito informó que otorgó un aumento de 16.940 millones de dólares en derechos especiales de giro -unos 21.570 millones de dólares- al crédito contingente para la Argentina que había sido aprobado el 10 de marzo del 2000 y aumentado en enero de este año.
La aprobación final del acuerdo con la Argentina estaba descontada luego de que el director gerente del FMI, el alemán Horst Köhler, anunciara el pasado 21 de agosto su recomendación al directorio de la entidad rubricar el memorandum de entendimiento.
El acuerdo con el Fondo fue conseguido luego de 12 días de negociaciones en Washington que fueron piloteadas por el viceministro de Hacienda Daniel Marx.
En el comunicado, la entidad consigna que la decisión hace que la Argentina tenga un acceso inmediato a 6.300 millones de dólares, y que el desembolso se hará efectivo dentro de los tres días. Anuncia además un desembolso adicional por 1.240 millones de dólares estará disponible más adelante, "luego de que se complete la quinta revisión del programa".
El directorio de la entidad multilateral se reunió ayer para considerar y aprobar el memorandum de entendimiento con la Argentina y mediante un comunicado explicó que "créditos adicionales serán facilitados al país en fechas aún por establecer durante el 2002".
Un equivalente de aproximadamente 3.000 millones de dólares previsto para el 2002 podrá ser anticipado "para apoyar una operación voluntaria y basada en el mercado para mejorar el perfil de la deuda argentina", agrega el escueto documento.
De ahora en más, el gobierno de Fernando de la Rúa deberá cumplir con las metas fiscales, que implican el cumplimiento a rajatabla con el programa de déficit cero para acceder a desembolsos adicionales por 3.000 de dólares que estarán precisamente destinados para la reestructuración de la deuda.
En ese sentido, Thomas Dawson, vocero del Fondo Monetario, señaló ayer que la Argentina necesitará más ayuda de otros organismos multilaterales y acreedores privados para emerger de la "trampa" de la deuda.
En rueda de prensa, Dawson admitió que esos 3.000 millones de dólares "no parecen suficientes por sí mismos" y que se precisará la ayuda de otros organismos multilaterales y del sector privado, en la misma línea en que se han manifestado altos representantes del Fondo Monetario.
Sin embargo, rechazó las cuestiones acerca de cómo podría llevarse a cabo la reprogramación de la deuda -"esa es una pregunta para el gobierno argentino", respondió- y aseguró que el FMI "no ordena" a la Argentina cómo llevar a cabo el proceso.
Por último, Dawson señaló que los bancos inversores y el gobierno argentino están trabajando en los detalles para reducir la deuda de la Argentina.



Fisher, Köhler y Dawson, los firmantes del acuerdo.
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