El Ministerio de Trabajo de la Nación ya implementó el Ingreso Social Básico (ISB). Se trata de un subsidio mensual de 100 pesos por cada desocupado jefe de hogar que no reciba otro aporte estatal, a cambio del cual deberá realizar 15 horas semanales de voluntariado social en una entidad benéfica. De esta forma se puso en marcha el convenio firmado entre la ministra de Trabajo de la Nación, Patricia Bullrich, y el gobernador Carlos Reutemann.
Los piqueteros que ayer se movilizaron por la ciudad cuestionaron duramente la aplicación de esta ayuda social (ver sección Política). Con este nuevo plan de asistencia fueron sustituidos los programas de Emergencia Laboral (PEL), cuyas retribuciones mensuales ascendían a 120 pesos por persona.
Según estimó el gerente de Empleo y Capacitación Laboral de Rosario, Norberto Castellano, "a los 1.200 desocupados del sur santafesino que percibían fondos de la Nación se incorporarán unos 300 más, que deberán desarrollar tareas de voluntariado social en organizaciones intermedias, municipios y comunas".
Prueba piloto
El pasado 13 de agosto la ministra de Trabajo, Patricia Bullrich, y el gobernador Carlos Reutemann pusieron en marcha el ISB desde la sede local de Gobernación. Esta experiencia -tal cual reza el acuerdo- finalizará el 31 de diciembre del 2001 y servirá de prueba piloto para unificar la ayuda social desde el Estado.
El subsidio saldrá al rescate de la caída de los PEL, mientras que por ahora los planes Trabajar III seguirán hasta fin de año, a la espera de que el Banco Mundial refinancie nuevas partidas para el 2002.
En tanto, los planes Crear Trabajo se sostendrán unos meses más merced al aporte exclusivo del Estado nacional.
Respecto de los PEL, Castellano precisó que para el sur santafesino suman 1.200 beneficiarios, de los cuales 813 corresponden a la ciudad de Rosario.
Desde la Gerencia de Empleo y Capacitación, Castellano aseguró que "no habrá interrupciones en la ayuda social y quienes tenían estos planes se integrarán seguramente al nuevo mecanismo de asistencia estatal". Vale decir que las retribuciones de los PEL, que ascendían a 120 pesos, servirán para estirar la ayuda social hacia nuevos sectores.
Es por ello que, en una primera etapa del ISB, Castellano estimó que se podrán incorporar "unas 300 personas más" al listado de beneficiarios que ya venía percibiendo el cobro de un programa asistencial.
El nuevo plan de la Nación y la provincia no consiste en otra cosa que en un subsidio de 100 pesos a jefes o jefas de hogar que estén desocupados y acrediten carecer de algún otro tipo de ayuda estatal.
Cada uno de los beneficiarios deberá garantizar como contraprestación 15 horas semanales de trabajos comunitarios en instituciones abocadas al voluntariado social.
Por estas horas, en la sede local de la gerencia nacional de empleo se están recepcionando los formularios de inscripción que deberán completar los organismos responsables, anotar a los aspirantes y definirles una tarea y el lugar donde deberán desarrollarla, vale decir, la localización del proyecto.
En una segunda etapa, la institución intermedia le entregará a quien obtuvo el beneficio un formulario que servirá como declaración jurada, de modo que la Administración Nacional de la Seguridad Social (Ansés) y el Ministerio de Trabajo les otorguen el alta correspondiente.
Cumplido el mes de trabajo, se podrá cobrar el ISB por ventanilla de un banco, con el certificado de la entidad intermedia y el DNI.
Castellano estimó que en unos 60 días se comenzará con el cruce de padrones de beneficiarios con la provincia y la fiscalización de cada uno de los proyectos por parte de inspectores de la cartera laboral.
Los planes en el municipio
A su turno, el secretario de Promoción Social, Miguel Zamarini, explicó que de los 813 PEL que existían en Rosario "550 se desempeñaban en la Municipalidad en las direcciones de Hidráulica, Educación y Tránsito, y en programas de política ambiental y prevención de zoonosis".
Estos beneficiarios -apuntó el funcionario- "serán reconvertidos dentro del ISB", pero aclaró que el Ejecutivo seguirá sosteniendo "unos 250 adjudicatarios de 160 pesos mensuales de remuneración, con recursos de la propia Municipalidad". Además, se deben sumar "otros 500 con el mismo ingreso por mes que vienen del aporte realizado por el Concejo Municipal".
Zamarini apuntó que se deberá definir en estos días cómo se aplicará la equiparación de los planes sociales y rescató "el excelente desempeño que han tenido todas las personas que participaron de los programas PEL y Trabajar".
La Ciudad
