El representante de Comercio de Estados Unidos, Robert Zoellick, le bajó el tono a la posibilidad de negociar una zona de libre comercio del tipo cuatro más uno con el Mercosur, al asegurar que ese objetivo no es la prioridad del gobierno de George W. Bush. Al término de un encuentro que mantuvo con los cancilleres de Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay en el marco de la reunión de representantes del Grupo Cairns que se desarrolla en Punta del Este (Uruguay), Zoellick aclaró que el objetivo que persigue Estados Unidos a través de las negociaciones con el Mercosur es acordar temas específicos, como la liberación del comercio agrícola, para imponer más presión en la Organización Mundial de Comercio (OMC). La posición del representante estadounidense, que participa como invitado de la cumbre del Grupo Cairns, contrastó con la del canciller argentino Adalberto Rodríguez Giavarinni, quien señaló que el objetivo último de la negociación entre los países del Mercosur y Estados Unidos "es llegar a un área de libre comercio" a través de una "agenda muy práctica que servirá como catalizador" para avanzar en la creación del Area de Libre Comercio de las Américas (Alca). La reunión de Punta del Este fue el primer contacto que mantuvieron los funcionarios de Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay con representantes de Estados Unidos, para la negociación de un acuerdo entre la primera potencia mundial y el bloque sudamericano. Formalmente, las conversaciones se iniciarán el 24 de septiembre en Washington, con un temario que incluye acceso a mercados, facilitación de inversiones y biotecnología. Pero mientras los sudamericanos se entusiasman con la posibilidad de obtener resultados a nivel continental respecto de esos temas, el funcionario norteamericano subordinó todo a la negociación global en el seno de la Organización Mundial de Comercio (OMC). El organismo internacional auspicia una conferencia ministerial a realizarse durante el mes de noviembre en Qatar, con la intención de lanzar una nueva ronda internacional de negociaciones comerciales, luego del fracasado intento de la Ronda del Milenio en Seattle. Allí, Estados Unidos debatirá subsidios, acceso a mercado, inversiones y otros temas relacionados con el comercio, con otros pesos pesados como Europa y Japón. "Esperamos que el 4+1 sea la marca de la administración Bush para acuerdos más amplios en lo que nuestro gobierno llama nuestro vecindario", dijo sin tapujos Zoellick, quien aclaró que "con el Mercosur tratamos de enfocarnos en temas específicos que puedan servir para las discusiones globales". Sobre la zona de libre comercio, aclaró que "no es este el momento" de discutirla. El representante comercial de Estados Unidos mantuvo por la mañana una reunión con los cuatro cancilleres de Argentina, Adalberto Rodríguez Giavarini; de Brasil Celso Lafer; de Paraguay, José Antonio Moreno Rufinelli, y de Uruguay, Didier Opertti, en la que se estableció la agenda de negociaciones para el 4+1. Rodríguez Giavarinni no se inmutó por el desaire norteamericano. Dijo que Estados Unidos expresa una posición "muy cercana" a la del Mercosur en materia del tratamiento igualitario que se debe dar a nivel mundial entre el comercio de la producción agrícola y la industria, que se refuerza con el respaldo a las tratativas del grupo Cairns. "Para nosotros una temática de la agricultura consensuada es significativa, porque el mensaje que le vamos a estar mandando al mundo es que estamos buscando el crecimiento de las naciones en desarrollo a través del libre comercio", señaló Rodríguez Giavarini.
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