San Jorge. - Continúa la tensión en torno al conflicto que se desató entre una cerealera y camioneros sanjorgenses por el precio que la empresa ofrece para el traslado de granos hasta la zona portuaria del Gran Rosario. El problema llevó a que la semana pasada los transportistas realizaran una medida de fuerza frente al acceso a la planta cerealera, situación que desencadenó en un choque entre los trabajadores y la policía en el que tuvo protagonismo el intendente Enrique Marucci, quien se opuso a la detención de uno de los manifestantes y junto a algunos concejales apoyó el reclamo.
Los trabajadores permanecen en asamblea permanente hasta tanto se llegue a un acuerdo entre las partes. Si bien las negociaciones tomaron un rumbo más cordial, la posibilidad de arribar a un convenio parecía lejana al cierre de esta edición debido a que un comunicado de la firma planteó la intención de no ceder a los reclamos por considerarlos "injustos".
No es la primera vez ni el primer lugar en el que se presenta un cuadro como este. El año pasado, por ejemplo, también en esta ciudad se presentaron conflictos así, que coinciden con la época de grandes cosechas. La situación económica hace que muchos camioneros resignen algunos pesos con tal de conseguir trabajo y eso genera problemas con los que están agremiados, que suelen pedir que se respeten las tarifas convenidas y se dé prioridad a los camioneros de cada zona.
Desde la tarde de anteayer se sumó a la mesa de diálogo el subsecretario de Transporte de la provincia, Carlos Alberto Muia, quien evitó dar precisiones sobre el estado de la situación, posición que fue imitada por el presidente de Transportadores Rurales Argentinos (TRA), Carlos Alberto Di Nuncio, y el presidente de la delegación de la entidad en San Jorge, Jorge Bonelli. Los dirigentes aseguraron que darán un comunicado conjunto cuando se "visualice un principio de acuerdo".
Actividad coartada
El directorio de la empresa Gavigio Comercial SRL consideró que los integrantes de TRA-San Jorge "coartaron la actividad en la operatoria de traslado de granos de soja a los puertos de San Lorenzo, Puerto San Martín y Rosario".
Según manifestaron "la firma opera en una vasta área de las provincias de Córdoba y Santa Fe, por consiguiente la alta capacidad de acopio, el aumento del área sembrada agregado al stock remanente de cosechas anteriores, sumado a los rindes excepcionales, condujo a una dinámica operatoria de retiro de mercadería para evitar el caos propio que deriva del momento de la cosecha".
Destacaron que en aras de prevenir la paralización del movimiento de granos la empresa recurrió a la contratación del servicio "de unos 350 camiones, a los cuales es menester proveerlos de cargas en tiempo y forma para evitar otro problema, que es la paralización de los mismos si no se toman los recaudos necesarios, ocasionados ya sea por lluvias, demoras en puerto o huelgas y feriados, entre otros".
Esta firma "consideró imprescindible conseguir depósitos en dirección descendente a los puertos de embarque, en trayectos desde los lugares de producción a los de destino de la mercadería". La posibilidad se dio a través del "arriendo a las instalaciones de la firma Molinos Harineros Brüning, contrato que en forma excepcional y por un tiempo limitado posibilitó en los momentos pico de cosecha, cumplimentar la función de pulmón de la mercadería depositada allí en forma transitoria. Esta circunstancia benefició a una empresa de esa localidad (San Jorge) y a los trabajadores que cumplieron y cumplirán las tareas de carga y descarga", enfatizaron.
El directorio destacó su intención de "dejar perfectamente aclarado que en San Jorge esta firma no actúa comercialmente ni cuenta con las oficinas destinadas a tal fin", y afirmaron en forma categórica: "La mercadería ahí depositada no pertenece al distrito San Jorge y no hemos participado en reunión o convenio alguno con los transportistas de la ciudad".
Además aclararon que "si bien la firma no adquirió cereales en el distrito San Jorge, ante la necesidad de camiones, hemos requerido al centro de transportista de la ciudad, en épocas de cosechas, unidades que no nos han sido provistas". Remarcaron que su operatoria comercial se encuadra "dentro del cumplimiento de las leyes", y destacaron que "el servicio que nos presta el transportista es pagado totalmente con rigurosa puntualidad".
Finalmente, calificaron de injusto "el hecho de que un grupo reducido de personas, que ni siquiera han actuado durante todo este tiempo en nuestra empresa, pretendan ahora crear una imagen adversa a nuestros principios que son públicos y notorios".