Pensar y hacer

Amilcar Carlos Ruíz (*)

Buena o mala, con falencias o sin ellas, la ley federal de educación propone la incorporación de la educación tecnológica como área específica y obligatoria. En este sentido, podemos analizar el significado de tecnología como un conjunto ordenado de conocimientos y procesos que tienen como objeto la producción de bienes y servicios teniendo en cuenta la técnica, la ciencia y los aspectos económicos, sociales y culturales involucrados. El sistema productivo "hace tecnología", es una forma de pensar. La tecnología como tal se encuentra transversalmente sobre todos los aspectos de la vida cotidiana de relación del hombre, sobre todas las disciplinas y culturas por ser una creación propia del mismo.
Sin embargo, más allá de la transversalidad que manifiesta, podemos asociar tales campos conceptuales al tratar de llevarlo al campo de la formación. Es allí donde aparece la educación tecnológica como una instancia de formación que capacita a una persona para comprender la tecnología, su accionar y/o preparar para la búsqueda, adaptación, creación, selección, evaluación y uso de la misma. Es la forma de relacionar el pensar con el hacer brindando un espacio de reflexión a partir de un producto tecnológico.La incorporación de tecnología en el diseño curricular implica en sí misma la admisión de una metodología propia que provoque sobre el sujeto que aprende deseos de superación y entusiasmo, al mismo tiempo que una apertura mental hacia el "aprender a aprender", tal como señala la pedagoga italiana María Famiglietti Sechi. De allí que se trata de considerar un sujeto pensante capaz de desarrollar por sí mismo estructuras lógico complejas que le permitan adaptarse a la diversidad de situaciones que pueda enfrentar en la vida. También de organizar las clases, según el sujeto que aprende.
(*) Profesor de educación tecnológica
Capacitador regional