Año CXXXIV
 Nº 49.229
Rosario,
martes  04 de
septiembre de 2001
Min 10º
Máx 13º
 
La Ciudad
La Región
Política
Economía
Opinión
El País
Sociedad
El Mundo
Policiales
Escenario
Ovación
Suplementos
Servicios
Archivo
La Empresa
Portada


Desarrollado por Soluciones Punto Com





Un polémico control de alcoholemia terminó en Tribunales
Denuncian a agentes de Tránsito por supuesto abuso de autoridad
Una conductora aseguró que un grupo de inspectores la "demoró y amenazó" durante "más de una hora"

Carina Bazzoni

Una mujer denunció ayer en la Fiscalía Nº9 a un grupo de inspectores de la Municipalidad por supuesto abuso de autoridad en la realización de un operativo de tránsito. Según el relato de la conductora, los agentes "se apropiaron" de la documentación de su vehículo y la "demoraron y amenazaron durante más de una hora" en la calle. Desde la Dirección de Tránsito desmintieron esta versión.
Cuando a las 2.15 del sábado, Marisa Sorbello obedeció las órdenes de cuatro inspectores municipales y detuvo su Volkswagen Polo azul en Vélez Sarsfield y Thedy, nunca imaginó que el episodio la llevaría dos días después a denunciar el caso en los Tribunales. Seguramente, los agentes municipales tampoco.
Todo empezó cuando la mujer, que volvía de una fiesta organizada por el colegio Inglés, fue interceptada por un operativo de tránsito. "Me hicieron señas con linternas y me pidieron que parara el auto. Obedecí, se me acercaron tres hombres y una mujer y me pidieron que les mostrara la documentación del auto. Les mostré los papeles y me dijeron que esperara. Así lo hice", recordó Sorbello.
Hasta el momento todo marchaba bien, pero pronto comenzaron los incidentes. "Volvieron hasta el auto y me dijeron que me bajara porque tenía que hacer un control de alcoholemia. Yo no había bebido, les dije que me tomaran el test pero que del auto no me bajaba. Ahí me dí cuenta que la inspectora me había sacado los documentos de la consola de mi vehículo. Les pedí que me los devolvieran. Me respondió socarronamente: «Bueno; si los quiere, bájese» y así estuvimos un buen tiempo", continuó la mujer.
Finalmente, los inspectores le devolvieron la documentación y la mujer accedió a hacer el test. Sin embargo, en dos oportunidades el aparato marcó un error de medición. "Yo no estaba ebria, ni había cometido una infracción, mis dos hijos estaban cansados y querían irse a casa. Pregunté a los agentes hasta cuándo me iban a tener en la calle demorada y me amenazaron con que si me iba me llevarían a la comisaría", indicó.
Para ese momento, "ya había pasado una hora" desde que la habían parado. "Entonces -recordó- mi marido me llamó al celular, le conté lo que me pasaba y vino a apoyarme. Presentó su carné de conducir y se ofreció a manejar el auto si nos dejaban ir. De todas formas, los inspectores insistieron con labrarnos un acta donde decían que yo me había resistido a hacer el control de alcoholemia. Nosotros no la firmamos y finalmente nos fuimos".
En vano fue que, "en varias oportunidades", la mujer pidiera que los inspectores se identificaran. "Se me reían, me amenazaron con llevarme a la comisaría o sacarme el auto", se quejó Sorbello.
Sin embargo, para el director de Policía de Tránsito de la Municipalidad, Donato Di Leo, el operativo de la madrugada del sábado siguió "un procedimiento normal. Tengo un acta en donde especifica que la mujer se negó a hacerse el control de alcoholemia", indicó el funcionario, y explicó que "la mujer estuvo sólo 30 minutos demorada" y remitió esta espera "a que ella prefirió que el marido pasara a buscarla".
Di Leo afirmó también que de ese operativo participó el coordinador de la Dirección General de Tránsito, Luis Rodríguez. "Si él hubiera detectado algo fuera de lo común, me lo habría hecho saber", aseguró.



La conductora dijo que la amenazaron.
Ampliar Foto
Diario La Capital todos los derechos reservados