Un régimen de justificación de inasistencias para alumnas embarazadas que cursen sus estudios en establecimientos dependientes del Consejo General de Educación de Entre Ríos, recibió ayer sanción definitiva del Senado provincial, lo cual permite que aquellas puedan gozar de licencia pre y posparto de hasta 30 días, y de un permiso especial de una hora diaria por seis meses para amamantar al bebé.
La iniciativa, que partió de un proyecto del vicepresidente primero del Senado, Jorge Campos, había vuelto en revisión a esa Cámara luego que Diputados le incorporara un artículo que rechaza todo tipo de discriminación que perjudique a las alumnas que estén en estado de gravidez.
Según lo adelantado por Campos, la ley establece un período de 15 días anteriores a la fecha prevista del parto y un lapso similar posterior al nacimiento del bebé, donde las inasistencias a los establecimientos educacionales se considerarán justificadas. Además, la medida contempla que los días no usados en el primer concepto serán acumulados al segundo hasta cubrir un máximo de 30 días.
Producido el nacimiento -lo que se acreditará con la correspondiente partida- y si la madre amamanta, la alumna gozará de un permiso especial de una hora diaria con ese fin, durante seis meses, a contar de la fecha del nacimiento del bebé.
Atención de la maternidad
En los considerandos de la iniciativa, Campos recalca que la atención de las necesidades inherentes a la maternidad en el proceso de pre y posparto, imponen, en este caso a las alumnas, un uso irrestricto del tiempo y una dedicación correlativa a la trascendencia del proceso que se viene desarrollando.
"Estas circustancias provocan muchas veces la imposibilidad de concurrir a clases generándose los conflictos consecuentes para la justificación de las inasistencias, que terminan generalmente con la deserción escolar", agregó.
Campos reveló también que, según datos difundidos por el Consejo Nacional de la Mujer, vinculados con la problemática de la maternidad adolescente, en la Argentina de cada 20 bebés, tres son hijos de madres adolescentes. En cuanto a los embarazos no deseados, uno de cada cinco corresponden a madres en edad escolar.
"En sentido análogo, Unicef, en un estudio que realizó durante 1991 y 1998, sentenció que el 15 por ciento de los nacimientos habidos en nuestro país correspondieron a madres menores de 20 años, seguramente muchas de ellas en edad de asistencia a establecimientos escolares, que obviamente ven dificultada la continuidad de sus estudios", completó el senador Campos.
La Ciudad
