El comerciante bonaerense Gabriel Ernesto Pellado fue asesinado, como máximo, cuatro días antes de que su cadáver fuera encontrado en un desagüe paralelo a la autopista Rosario-Buenos Aires. Así lo reveló un informe preliminar de la autopsia que se hizo sobre el cuerpo, en el cual también se da cuenta de la causa de muerte: tres fuertes golpes en el cráneo que le provocaron hematomas subdurales.
El dato sobre la posible fecha de fallecimiento de la víctima arroja sobre la investigación del crimen una cuota más de misterio. Los investigadores, sumidos en el más estricto de los silencios, intentan establecer qué sucedió con Pellado entre la noche del jueves 16 de agosto, última vez que se lo vio con vida en Rosario, y la mañana del lunes pasado, cuando su cuerpo fue encontrado en un canal pluvial de la zona rural de Villa Gobernador Gálvez.
En el marco de la pesquisa, el juez de instrucción Juan José Pazos realizó ayer una inspección ocular en el zanjón donde fue encontrado el cuerpo y luego se trasladó hasta el sector del balneario Vigil, detrás del Frigorífico Paladini, donde apareció abandonado el coche. En breves declaraciones, el magistrado indicó que "existen varias hipótesis que se están investigando. Algunas son más fuertes que otras, pero no las podemos difundir porque se está en plena tarea junto con la policía".
Pazos reiteró que aún "no hay una pista firme sobre los homicidas" y se amparó en el secreto de sumario para brindar más detalles. El magistrado no descartó ninguna hipótesis. "En un hecho de estas características surgen infinidad de versiones, pero a veces se puede prestar a confusión", remarcó. "Tanto la policía como el juzgado no descartamos nada", agregó.
En ese marco, ayer trascendió que el magistrado habría dispuesto una serie de allanamientos en la zona costera de Villa Gobernador Gálvez, presumiendo que en el lugar habría estado aguantado Pellado desde su desaparición hasta su muerte. Sin embargo, la especie fue categóricamente desmentida por los voceros .
Chequeo de identidades
Bajo estricta reserva de identidad, algunos investigadores del homicidio de Gabriel Pellado manifestaron anoche que se está "atravesando la etapa de chequeo de identidades". Esto significa establecer fehacientemente la relación que tenía la víctima con unas 20 personas que oportunamente fueron convocadas a prestar declaración testimonial. "Tenemos algunas personas que pueden ser sospechosas, pero no queremos detener a nadie si antes no contamos con pruebas. Queremos investigar para detener y no al revés", aseguraron los voceros.
Asimismo, los pesquisas reconocieron que el homicidio "no fue cometido por profesionales" y agregaron: "Asesinar a una persona de tres fierrazos en la cabeza no es trabajo de expertos".Los "tres fierrazos" que causaron la muerte de Pellado le afectaron la membrana duramadre, que se halla entre el cráneo y el cerebro, generándole tres hematomas. "Ahora los estudios anatomopatológicos determinarán si esos hematomas fueron mortales o si le provocaron un estado de inconsciencia que lo llevó hacia la muerte", confiaron los investigadores en referencia a la autopsia.
Acerca de los móviles del homicidio, las fuentes corroboraron lo anticipado por La Capital en su edición de ayer: "Esto no es algo fortuito, es una venganza por plata o mujeres", sostuvieron. En ese sentido aseguraron que se estuvo investigando a un policía de la Unidad Regional II con cuya esposa Pellado habría mantenido una relación amorosa durante sus asiduos viajes a Rosario, pero manifestaron "que eso ocurrió hace más de un año, es algo que se siguió como pista pero por ahora se cayó". En tanto, sigue bajo la lupa de los policías un grupo de mujeres con las cuales el empresario mantenía relaciones, entre ellas una de Villa Gobernador Gálvez, donde fueron hallados el cadáver y el auto.
Acerca del móvil económico, los pesquisas están analizando los movimientos de dinero de la empresa familiar de Pellado, dedicada a la fabricación de suero vacuno, y sus vinculaciones en Rosario, donde el empresario tenía contactos en varios frigoríficos.