Santa Fe.- El juez José Manuel García Porta indagó ayer a Jorge Daniel Cañete, detenido en la cercana ciudad de Laguna Paiva por vender en la provincia de Santa Fe automotores que habían sido robados por una organización que los obtenía en asaltos a mano armada y que venía operando en la Capital Federal. Las investigaciones se iniciaron cuando una persona que se dirigía en una camioneta a Paraná, para jugar en el casino de dicha ciudad, fue detenida en un operativo de rutina y no pudo demostrar la propiedad del vehículo último modelo que conducía. Al ser interrogado admitió que había adquirido la camioneta a Cañete, una persona que residía desde hacía un año en Laguna Paiva y que provenía de Arrecifes, en la provincia de Buenos Aires. Las indagaciones posteriores pudieron establecer que Cañete vendía coches sustraídos en la ciudad de Buenos Aires, en asaltos a mano armada perpetrados contra personas sorprendidas al momento de guardar sus coches en las cocheras. En general se trataba de vehículos último modelo que en esta zona eran vendidos a muy bajo precio (entre 3 y 5 mil pesos por rodado), a los que se les adulteraba la chapa pat ente y a cuyos nuevos "propietarios" se les proveía de tarjeta verde y otra documentación apócrifas. La policía pudo recuperar cinco de los coches comercializados por Cañete, dos de ellos en Santa Fe y los restantes en Laguna Paiva. El malviviente en el interrogatorio del juez intentó desestimar los distintos cargos que pesan sobre él, entre ellos los de encubrimiento y adulteración de documentos públicos. Al parecer hay dos personas prófugas, que serían oriundas de la ciudad de Rufino. En tanto, a las personas que compraron a sabiendas los vehículos robados se les imputaría la figura de encubrimiento. Por otra parte, según la agencia El Consultor Web, cinco son los automotores secuestrados por la policía y que fueran robados a mano armada en Capital Federal. Se trata de un Peugeot 406, dos camionetas Ranger 4x4, una camioneta Renault 4x4 y un Fiat "virtualmente 0km". Dos de los vehículos habrían sido "ubicados" por Cañete en esta ciudad y otros tres en Laguna Paiva. Los autos tenían al momento de ser secuestrados tarjeta verde y patentes truchas.
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