Luego del crecimiento vertiginoso que tuvieron los papeles en la Bolsa de Comercio porteña el miércoles, sobrevino ayer una esperable toma de ganancias. Con ese escenario, el panel de las acciones líderes retrocedió un 2,76 por ciento, mientras que los bonos mantuvieron una buena performace para posicionar el riesgo país en 1.423 puntos.
Pese a que algunos prefirieron cristalizar diferencias, el trámite de los negocios fue tranquilo y sin las presiones de las últimas ruedas respecto a las dudas sobre la capacidad de pago de la Argentina.
Para los analistas bursátiles las exigencias del apoyo externo se convertirán en las variables centrales que monitorearán los operadores, entre ellas especialmente el mayor ajuste en las provincias a fin de alcanzar el déficit cero.
Los títulos públicos, en cambio, mantuvieron posiciones, si bien entre las emisiones más representativas los bonos globales 2008 quedaron 0,14 por ciento abajo. En el exterior los FRB se cotizaron a 76,50 dólares la lámina de cien con una mejora del 1,32%.
Los expertos advierten una oportunidad de arbitraje a través de la venta de globales 2009 y compra de la serie 2018, "títulos de buena liquidez que han mostrado diferentes performances recientes", señalaron los operadores.
Los análisis de la firma bursátil Allaria Ledesma no esperaban que la volatilidad y el escepticismo de los operadores desaparezca en un día, "pero ciertamente da la sensación que se verificó un punto de inflexión" al referirse a la marcha de los bonos de la deuda.
Según los expertos, los títulos públicos todavía tienen un potencial de apreciación superior al 20 por ciento para llegar a una curva de rendimientos acorde con una situación "sustentable".
El mejor clima en los mercados vino de la mano del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional que planea desembolsar 8.000 millones de dólares, llevando a 22.000 millones el crédito stand-by que mantiene con el país. Durante meses en los mercados se tenía la sensación de que el país se iba a declarar en moratoria debido a que la economía no crece desde hace tres años.
Recién llegado desde Washington, el viceministro Daniel Marx afirmó que la carta de intención con el FMI "estará lista en unos días".
"Creemos que la Argentina obtuvo el mejor paquete que se podría haber esperado por parte del organismo internacional", señaló en un informe Merrill Lynch.
Sin embargo, el banco de inversión recomendó a los inversores que sigan con una ponderación por debajo del mercado en bonos de la Argentina, debido a que la ayuda financiera "no trae cambios mayores en su panorama de mediano plazo".
El call money casi no acusó cambios. Esta postura se debió a que los ahorristas renovaron en general sus depósitos. De esa forma, se transó entre 14,5 y 15 por ciento en pesos a un día, y osciló entre 9 y 9,75 en dólares, para igual lapso.
Desconfianza generalizada
Los mercados latinoamericanos cerraron ayer con pérdidas ante las dudas de los inversionistas sobre si el préstamo de fondos adicionales del FMI a la Argentina será suficiente para que la economía del país se recupere.
En la bolsa de San Pablo el optimismo duró apenas un día y su índice Bovespa cayó ayer el 1,55 por ciento, afectado también por el mal desempeño de las empresas de telefonía.
El mercado mexicano se enfocó en la Bolsa de Nueva York, y en los datos de la inflación local en agosto. El índice IPC (.MXX) de la Bolsa de México cerró con un descenso de 0,61 por ciento, a 6.294,29 puntos. La plaza bursátil amplió su baja inicial influida por Wall Street, tras el anuncio de un alza de los precios en la primera quincena de agosto mayor a la esperada.
En Wall Street el índice Dow retrocedió 0,46 y el Nasdaq de las compañías de alta tecnología 0,92 por ciento.