Buenos Aires.- El dueño de un supermercado de General Gutiérrez, en el partido bonaerense de Berazategui, fue asesinado ayer a balazos por el propietario de otro comercio del mismo rubro, quien al parecer lo envidiaba y le recriminaba que tuviera precios más bajos, informaron fuentes del caso.
Tras el crimen, el acusado intentó escapar, pero fue detenido luego de una persecución de diez cuadras en la que incluso apuntó contra los policías que lo seguían, quienes debieron hacer dos disparos intimidatorios, dijeron fuentes de la comisaría 3ª de Berazategui. En poder del acusado fue secuestrada un arma calibre 38 largo con dos disparos efectuados, que es sometida a peritajes.
El homicidio ocurrió a las 10.30 de ayer en el supermercado ubicado en 413 y 454 de General Gutiérrez, al sur del Gran Buenos Aires. La víctima del asesinato fue identificada como Jorge Omar Agnoni, de 34 años, quien recibió dos disparos en el pecho. En tanto, el acusado de matarlo es Roberto Antonio Mauseri, de 58, explicaron fuentes policiales.
Ante testigos
"Por lo que dicen los testigos, el acusado se presentó en el supermercado de Agnoni, y lo mató de dos balazos delante de los clientes y empleados que se quedaron perplejos", agregaron las fuentes.
"Lo sacó a la calle amenazándolo con el arma, y le disparó en plena vía pública", dijeron los voceros policiales, que confirmaron además que el comerciante murió cuando lo trasladaban a un hospital.
Los investigadores dijeron que tras el crimen, el acusado primero se cruzó con policías que patrullaban la zona, y les apuntó como para dispararles. "Entonces, el personal hizo dos disparos al aire, y el acusado se subió a una camioneta para iniciar la huida", dijo un jefe policial. Tras una persecución de diez cuadras, el sospechoso fue detenido a bordo de su camioneta Ford F 100 en inmediaciones de la seccional local.
Varios testigos dijeron que existía una mala relación entre los comerciantes. Agnoni y Mauseri tenían sus supermercados en la misma cuadra. Empleados de la víctima relataron que "hace varios días, el acusado del crimen le reprochó a Agnoni el hecho de que vendiera la mercadería a precio más bajo, e incluso que hubiera abierto más locales en la zona".
Según las fuentes, "Mauseri, que era un comerciante más antiguo en el barrio, se pudo sentir perjudicado por Agnoni porque este se expandió con la apertura de más sucursales y la baja de precios".