Año CXXXIV
 Nº 49.216
Rosario,
miércoles  22 de
agosto de 2001
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El municipio verificará si el relleno sanitario causa afecciones

En un intento por destrabar el conflicto generado con los vecinos del Camino Viejo a Soldini, quienes se quejan por la presencia en su barrio del relleno sanitario de Puente Gallego y comenzaron a entorpecer el ingreso de los camiones de residuos, la Municipalidad realizará un seguimiento epidemiológico de posibles casos de afecciones respiratorias en el lugar. Pero el municipio desplegará además otro abanico de seducción: el secretario de Servicios Públicos, Miguel Lifschitz, adelantó la posibilidad de concretar obras de infraestructura, como el mejoramiento de la plaza, el club y el alumbrado público del barrio. A estos trabajos se sumaría la construcción de una bicisenda sobre Ovidio Lagos.
El paquete de ofertas forma parte de un plan de consenso que tiene como único objetivo limar las asperezas con los vecinos, quienes anteayer realizaron piquetes para impedir el ingreso de los camiones de residuos al vertedero y hasta amenazaron con arrojar basura en la puerta del domicilio del intendente Hermes Binner.
"Hay una verdadera inquietud de los vecinos, que atribuyen a la presencia del relleno sanitario la aparición de afecciones alérgicas y respiratorias", indicó Lifschitz, al tiempo que anunció que la Municipalidad realizará un seguimiento epidemiológico de esos posibles casos "para verificar el verdadero origen".
Pese a esto, el funcionario descartó de plano que la causa de las afecciones sea la presencia del vertedero. "Desde la Secretaría de Salud Pública se descarta por completo, pero para tranquilidad de los vecinos vamos a realizar un censo y seguimiento de los casos que denuncian", indicó.
En un intento por llevar tranquilidad a los pobladores del barrio, el secretario de Servicios Públicos remarcó que "la Municipalidad no va a seguir comprando terrenos en ese sector para depositar los residuos. En dos años y medio termina la actividad en el relleno Gallego III y nos retiramos del lugar", aseguró.
En otro orden, informó que "para fines de octubre" estará terminado un estudio de impacto ambiental que ordenó realizar el Concejo. "Lo que estamos intentando es generar una mesa de diálogo y consenso que nos permita sobrellevar el marco de conflicto generado con los vecinos", señaló el funcionario, quien confesó que hasta ayer no había recibido ninguna respuesta de los representantes del barrio. Mientras tanto, los piquetes para impedir el ingreso de los camiones recolectores de residuos podrían reaparecer hoy en el lugar.


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