Silvia Carafa
Rufino. - Los representantes del extremo sur provincial afectados por los problemas hídricos lograron exponer su situación ante el secretario de Obras Públicas de la Nación, Carlos Bastos. El grupo, que pudo llegar al Ministerio de Economía después de interesar a los legisladores nacionales en el tema, volvió con un anuncio bajo el brazo: se puso en marcha la recuperación de la ruta 7 que desde hace dos años tiene 18 kilómetros bajo agua. "Ya mismo comienza la reparación de la ruta 7 a través de un desvío. Los fondos necesarios están depositados en el Banco Nación", aseguró el diputado nacional Héctor Cavallero, gestor de la reunión. La agenda incluyó el análisis de la crisis hidrológica del corazón de la Pampa Húmeda y el eventual corte de la ruta 33 entre Rufino y Amenábar. También se trató la espinosa cuestión del amparo judicial interpuesto por Buenos Aires y que impide drenar el agua de la laguna La Picasa, a través de una canalización construida por el gobierno santafesino como "acción mitigadora". El compromiso de arreglar la ruta 7 sonó a trofeo para los delegados del sur santafesino que desde 1998 fatigan despachos en busca de soluciones. "Se harán tareas de amurallamiento y prevención para evitar el corte de la ruta 33, amenazada por el agua a la altura de los kilómetros 574 y 575", explicó Cavallero. En el encuentro también se confirmó para el mes entrante la apertura de tres licitaciones que involucran críticos espejos de agua. El 3 de septiembre se abrirán los sobres que, por 10 millones de pesos, licitan las obras de enlace entre La Picasa y Las Horquetas, y la ampliación de La Salada. El 10 se conocerán ofertas por la ampliación de la capacidad de Mar Chiquita por 25 millones. El 24 del mes próximo, la apertura será para concesionar la segunda etapa de Las Horquetas. "Estas obras, que posibilitarán el volcado de las aguas de La Picasa a la cuenca del río Salado, a través de la alternativa sur, tendrán 24 meses de plazo de ejecución", explicó Cavallero. Respecto de la alternativa norte, opción neutralizada por un recurso de amparo presentado por partidos de Buenos Aires que no aceptan recibir agua a través del río Salado, el legislador apuntó que se espera que la Corte Suprema de Justicia de la Nación, llame a conciliación a las tres provincias que comparte la impresionante masa hídrica instalada en el centro de la Pampa Húmeda, Córdoba, Buenos Aires y Santa Fe, a fin de que puedan acordar el drenaje del líquido.
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