Año CXXXIV
 Nº 49.212
Rosario,
sábado  18 de
agosto de 2001
Min 9º
Máx 11º
 
La Ciudad
La Región
Política
Economía
Opinión
El País
Sociedad
El Mundo
Policiales
Escenario
Ovación
Suplementos
Servicios
Archivo
La Empresa
Portada


Desarrollado por Soluciones Punto Com






Soja: Santa Fe defiende con todo el primer lugar
Agricultura de la provincia estimó una cosecha de 8,6 millones de toneladas y abrió una polémica con Córdoba

Alvaro Torriglia

La Secretaría de Agricultura de Santa Fe salió a contestar con sus propias cifras el anuncio de las autoridades cordobesas respecto de que la provincia vecina se había convertido en la primera productora de soja del país luego de una cosecha de 7.198.000 toneladas en la campaña 2000/01. Dos semanas después de que se conocieran los números cordobeses, difundidos incluso por el gobernador José Manuel de la Sota, la cartera agropecuaria santafesina informó que en la provincia la recolección de la oleaginosa llegó a las 8,6 millones de toneladas, casi un millón y medio más que los vecinos.
Se abrió así una polémica que es meramente folklórica en cuanto al significado económico, ya que la producción de la Región Centro conforma un mismo mercado que tiene como epicentro en Rosario, pero no tanto en el aspecto político. Tratándose de provincias gobernadas por dos presidenciables, cualquier indicador puede ser motivo de competencia.
La cartera agropecuaria santafesina aplicó un rendimiento promedio de más de 27 qq/ha a las estimaciones sobre siembra de soja difundidas por la Sagpya a principios de agosto, de 3.090.400 hectáreas. Esta productividad está casi en tres quintales por hectárea por encima del promedio nacional y cuatro arriba de las cantadas por la Secretaría de Agricultura de Córdoba.
El titular de la cartera agropecuaria santafesina, Oscar Alloatti, admitió sentirse sorprendido por los resultados: "Realmente no esperábamos rendimientos tan altos, sobre todo en lotes del extremo sur provincial que se habían dejado para el final por falta de piso y exceso de humedad, y que resultaron con rindes que en algunos casos superaron los 30 qq/ha", señaló.
Alloatti indicó que cerca de unas 600 mil toneladas de la campaña 2000/2001 se cosecharon en zonas que se habían dado por pérdidas y que se levantaron en julio. Esos productores, agregó, contaron con un bonus adicional: pegaron de lleno el brusco salto de los precios, haciendo diferencias de hasta 30 dólares por tonelada respecto de los que vendieron a principio de la cosecha.
El propio secretario de Agricultura había estimado una producción algo superior a las 7 millones de toneladas, cabeza a la cabeza con la cosecha declarada por Córdoba. "Lo que pasa es que en algunos casos hubo rindes sorprendentes", dijo y señaló que en las zonas en que se entró tarde por falta de piso "las pérdidas fueron muy pocas, en parte porque si bien hubo mucha humedad no hubo tantas lluvias, y en parte por la nueva genética permite contar con materiales más resistentes y rendidores".
Con estos datos, la cosecha santafesina de soja de la campaña 2000/2001 resultó 30% más que la campaña 1999/2000, cuando se recolectaron 6.637.500 toneladas. En plata, haciendo cálculos gruesos, significan unos 300 millones de dólares más. "Hay que tener en cuenta que lo que se vendió en maquinaria nueva el año pasado fue de 600 millones", dijo.De acuerdo a las cifras que maneja el gobierno provincial, Santa Fe participa con el 30% de la producción nacional de soja, base del principal complejo exportador de la Argentina. Más allá de la guerra de las cifras, la Región Centro es responsable del 60% de la cosecha total.
Un trabajo realizado por técnicos de la estación experimental Marcos Juárez del Inta indica que la expansión territorial de la oleaginosa se apoya en tres ítems: la adaptación a un amplio rango de ambientes, la mayor rentabilidad relativa y la simplificación de la producción del cultivo a partir de la siembra directa y los cultivares tolerantes a glifosato (RR).El informe dice que las perspectivas para la próxima campaña siguen a favor de la soja.
Alloatti señaló que el optimismo por los mejores precios se nota en el renovado interés que por estos días existe en torno de los alquileres de campos para la gruesa que comienza en apenas dos meses. Ese ánimo está contrastado con las dificultades que encuentran los productores para conseguir financiamiento para la compra de insumos y el temor de los proveedores a contratar operaciones que no saben si van a cobrar.


Diario La Capital todos los derechos reservados