Londres. - Neil Hamilton, el ex parlamentario británico y ex subsecretario durante el gobierno conservador de John Major (1992-97) que debió renunciar al cargo acusado de cobrar soborno, está ahora involucrado en un escándalo sexual de alto voltaje: lo acusan de haber asistido con su esposa a una violación mientras se masturbaban.
Christine y Neil Hamilton fueron detenidos el viernes por la tarde y sometidos a un interrogatorio policial durante unas cinco horas, tras la cual fueron dejados en libertad sin que se les formulasen acusaciones específicas aunque las investigaciones continúan. La pareja rechazó airadamente la acusación y aseguró que estaban en otro lugar la noche del 4 de mayo cuando en Ilford, Essex, una mujer de 28 años, madre de dos hijos, denunció haber sido violada en presencia de otras tres personas, entre ellos los Hamilton.
"Un caso kafkiano", así lo definió Christine al responder a los periodistas que desde ayer prácticamente sitiaron su casa de Battersea, en el sur de Londres.
La segunda vivienda, campestre, que el matrimonio tiene en Cheshire, se encuentra en venta para enfrentar los 1,8 millones de dólares que fueron condenados a pagar a Mohammed Al Fayed a quien abrieron una causa, negando haber recibido dinero a cambio de intervenciones políticas en favor del empresario egipcio dueño de Harrod's.
Hamilton fue acusado de haber recibido dinero y alojamiento gratuito en el hotel Ritz de París a cambio de hacer preguntas en interpelaciones parlamentarias pedidas por Al Fayed, a quien el gobierno niega la ciudadanía británica.
El escándalo estalló en 1994. Hamilton negó todo pero finalmente fue obligado por Major a renunciar e invitado a no tomar parte de la vida partidaria.
La vida de los Hamilton siempre estuvo bajo los reflectores. Famosos por las fastuosas recepciones y las cenas a base de langosta y champaña, el matrimonio casi se volvió un símbolo de frivolidad.
El juicio popular sobre su comportamiento político y personal es unánime aunque asombra y maravilla el deseo continuo de la pareja de no desaparecer en el olvido.
Conocidos en la TV
Cáusticamente un diario inglés escribe ayer que en todos los divanes de los estudios radiales y televisivos los Hamilton han dejado su impronta.
Ellos no han desmentido esta fama y sed de exhibicionismo. De hecho, la única persona que los acompañó el sábado durante toda la jornada, antes y después del interrogatorio, fue -además de su abogado- el presentador Louis Theroux que realiza un documental titulado "En casa con los Hamilton".