Bogotá. - El ejército de Colombia inició una ofensiva contra la segunda fuerza guerrillera del país, que lanzó una serie de ataques con saldo de cinco muertos y 39 heridos después de que el gobierno suspendió las gestiones de paz, informaron autoridades militares.
La operación militar podría provocar una escalada de los enfrentamientos con el izquierdista Ejército de Liberación Nacional (ELN) y un aumento de sus acciones ofensivas, según fuentes de seguridad.
El ejército también reportó la muerte de seis rebeldes del ELN en combates en el departamento de Magdalena, al norte del país, en un hecho no relacionado con la ofensiva que se realiza en el sur del departamento de Bolívar.
"El mando ordenó el traslado de tropas al sur de Bolívar para perseguir a los jefes del ELN y presionarlos militarmente a fin de evitar nuevos ataques terroristas como los que se registraron el jueves", dijo un oficial del ejército.
Las tropas que se desplazaron hacia el sur de Bolívar pertenecen a la Fuerza de Despliegue Rápido, una unidad de élite del ejército que ha propinado los más duros golpes a la guerrilla izquierdista en los últimos dos años.
A la región selvática y montañosa donde por años han tenido sus centros de operación los comandantes del ELN, se enviaron unos 2.000 soldados que cuentan con el apoyo de helicópteros artillados, precisó el portavoz castrense.
El ataque en Antioquia
Con la ofensiva, que se extenderá en los próximos días a otras regiones del país como el noroccidental departamento de Antioquia, también se busca evitar posibles ataques del ELN a la infraestructura petrolera y energética.
Esa guerrilla, que cuenta con 5.000 combatientes y que se inspiró en la revolución cubana para su creación hace 37 años, atacó el jueves a través de túneles y el sistema de alcantarillado el pueblo de San Francisco en Antioquia.
En el ataque murieron tres niños, 35 adultos resultaron heridos y 25 casas quedaron destruidas. El ELN también abandonó un coche bomba en las afueras del municipio de Gramalote, en el departamento de Norte de Santander, que al explotar causó la muerte a dos personas y heridas a cuatro más.
El ELN lanzó los ataques luego de que el martes el presidente Andrés Pastrana suspendió los contactos de paz que mantenía con esa guerrilla desde 1999 y con los que buscaba iniciar una negociación formal.
Pastrana, de 46 años, ha hecho del logro de la paz su principal gestión de gobierno en un intento por poner fin a la guerra interna más prolongada del hemisferio que dejó 40.000 personas muertas, la mayoría civiles, en la última década.