Pedro Squillaci
"Tengo la esperanza que a fin de año vamos a lograr el objetivo de dar 180 días de clase", enfatizó ayer el ministro de Educación de la provincia, Alejandro Rébola. Así, se puso en sintonía con su par en esa cartera a nivel nacional, Andrés Delich, quien días atrás aseguró que "se establecerá un mecanismo para que se garanticen los 180 días de clases". De lo contrario, Delich advirtió que el período lectivo podría alargarse, e inclusive hasta se sumarían horas extra los sábados. Rébola no ocultó su satisfacción por la decisión de los maestros de no adherir a la última medida de fuerza contra el ajuste. "Los docentes valoraron el esfuerzo del gobierno, y hoy Santa Fe es la única provincia del país que no se ha declarado en paro", dijo ayer en medio de los actos por el 113º aniversario de la Escuela Florentino Ameghino. El acto para celebrar otro aniversario del establecimiento ubicado en Buenos Aires 2027 se montó con todas las luces. Y pese a que el gobernador Carlos Reutemann y el intendente Hermes Binner no se hicieron presentes, todo fue una fiesta. Los chicos con pecheras con el logo del colegio, una revista estrenada para la ocasión, banderines flameando en el gimnasio cubierto, y hasta un pasacalle cruzando Buenos Aires que rezaba: "Más que una escuela, un sentimiento". En este escenario, hasta la secretaria de Salud Pública de la Municipalidad, Mónica Fein, pasó desapercibida, aunque concurrió en reemplazo del mismísimo intendente. En lo que respecta a Rébola, su protagonismo fue relevante pese a que tuvo que soportar dos cimbronazos . El primero, de los cooperadores, quienes le reclamaron públicamente gestiones más urgentes para que se implemente el 8º y 9º años de la EGB en esa escuela. El segundo, de los docentes en general, porque hace 20 días que esperan cobrar el incentivo. El ministro de Educación salió airoso de los dos embates. "El problema del 8º y 9º años es también una preocupación nuestra. Pero sería irresponsable prometer algo que no puedo dar", dijo en medio de su discurso ante la comunidad educativa. El problema de fondo es la falta de presupuesto del gobierno, que le impide cumplir con esta materia pendiente en una veintena de colegios de Rosario. "Tendríamos que crear más cargos en algunos casos y hacer reformas edilicias en otros. Y son cosas que están vedadas en este momento por falta de presupuesto en la provincia", dijo el funcionario. En lo que respecta al incentivo, precisó que aún la Nación no había remitido ningún dinero al Ministerio, pero que "a más tardar el lunes próximo tienen que hacer el depósito respectivo". En un reportaje publicado en La Capital el 13 de enero pasado, Rébola aseguraba que "este año habrá más días de clase", y prometió 185 en vez de 155 o 160. Para lograr eso hasta propuso que los docentes den los cursos de capacitación en las vacaciones de invierno, hecho que provocó el inmediato rechazo del gremio. Sin embargo, a siete meses de ese anticipo, los docentes ya dieron los cursos de capacitación en las vacaciones y, ante la batalla ganada por la falta de consenso docente para el paro contra el ajuste, Rébola va por lo prometido. Por eso no sorprendió cuando ayer dijo: "Tengo la esperanza de que vamos a llegar a 180 días de clase. Creo que en Santa Fe se están haciendo las cosas adecuadamente, no sólo en el pago de sueldos a término, sino en el mejoramiento de la calidad educativa". Siempre separando a los maestros del gremio, señaló: "Los docentes valoran el esfuerzo de Reutemann y este gobierno. Y los resultados están a la vista: hoy es la única provincia del país que no se ha plegado al paro". En el marco de la medida de fuerza de Ctera, Delich había convocado a un encuentro nacional para reordenar el pago de salarios y discutir las condiciones laborales de los docentes de todo el país. Y uno de los temas clave que se tratarán en las paritarias de septiembre con los ministros de Educación provinciales será garantizar los 180 días de clase. Esto coincide con el discurso que viene fogoneando Rébola y le llevó no pocos encontronazos con Amsafé. Delich propuso además que, de no llegar a esa cantidad de días de clases, "se añadirán horas extras los sábados, se alargará el período lectivo de fin de año o se comenzará más temprano en el 2002". Aparentemente, en Santa Fe esto no será necesario.
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