Reclaman deuda del ex frigorífico Carcarañá

Gustavo Orellano

Casilda. -A siete años de la quiebra del frigorífico Carcarañá sus ex obreros siguen reclamando el pago de sus indemnizaciones. En ese tiempo solamente percibieron un 17 por ciento de sus acreencias y están a punto de perder la paciencia "porque el tiempo pasa y no se toma ninguna resolución", dijeron. Esta situación afecta a casi 1.600 obreros que trabajaban en los dos establecimientos que poseía la ex empresa Carcarañá en la ciudad homónima y Casilda, que actualmente explotan otras firmas.
Un grupo de ex operarios de la planta casildense -ahora en manos de Rafaela Alimentos- solicitó al Concejo que "intervenga a nivel nacional para tratar, a través del síndico u otra autoridad competente, de llegar a un resultado favorable", según una nota que remitieron al cuerpo con el aval de numerosas firmas.
Los ediles formaron una comisión que tendrá la responsabilidad de averiguar en qué estado se encuentra el juicio correspondiente a la quiebra para luego definir los pasos a seguir. Los ex trabajadores amenazan con cortar la ruta 33, vestidos con uniformes y herramientas de trabajo, si no obtienen una respuesta en las próximos semanas.
Según los damnificados el dinero que reclaman está depositado en un banco de Buenos Aires y denunciaron que "existe una mano negra que está trabando el fallo judicial que permitiría librar esos fondos", aunque no brindaron más detalles.
El monto en cuestión rondaría los nueve millones de pesos que, según indicaron, serían destinados al pago de las indemnizaciones cuando la Justicia lo disponga. Trascendió que la causa habría llegado a la Corte Suprema de Justicia de la Nación.
"Si se liberan esos fondos estarían entrando a Casilda unos seis millones de pesos. Un flujo importante de dinero que ayudaría a movilizar el circuito comercial", dijo uno de los ex operarios del Carcarañá, Mario Tapia. Algunos de los ex trabajadores aún no lograron reinsertarse en el mercado laboral, mientras que el resto fue tomado por los empresas que compraron las plantas del ex Carcarañá o se dedicó a otras actividades.
Actualmente las dos firmas compradoras de la quiebra -Friar en Carcarañá y Rafaela Alimentos en Casilda- no están operando como consecuencia del cierre de los mercados internacionales de carne por la reaparición de la aftosa. Esa paralización preocupa cada vez más a las autoridades municipales, que deben hacer frente a los embates de la crisis y la desocupación.
"Alguien quiere detener el trámite para entrar en el reparto del dinero, pero no le vamos a dar oportunidad porque somos conscientes de la situación y estamos movilizados", dijo Tapia en relación a los sospechas que tienen sobre los motivos que estarían frenando la sentencia que esperan desde hace tiempo.
Las autoridades políticas de Carcarañá también vienen realizando gestiones para lograr ex trabajadores cobren, pero, hasta ahora, los resultados fueron nulos. "La gente de Carcarañá hace muchos años que viene trabajando detrás del tema, pero rebotan continuamente. Incluso recurrieron hasta la Defensoría del Pueblo, en Buenos Aires, para destrabar esta situación", explicó otro ex trabajador, Daniel Arario.
"Es lógico que pretendamos cobrar esa plata. La merecemos porque dejamos nuestro sudor y creemos que nos corresponde exigir lo que nos pertenece", dijo Juan Ramón Núñez.