El hombre que el martes pasado persiguió a los tiros a un supuesto ladrón por calle Pellegrini declaró que conocía con anterioridad al asaltante al cual corrió bajo una lluvia de balas sin lograr atraparlo. Es más: lo identificó con nombre y apellido e indicó el lugar exacto donde la policía podría hallarlo. La precisión con que sindicó al presunto ladrón reavivó las dudas de los investigadores, quienes sospechan que no habría sido un simple robo lo que desató la desmedida reacción de Roberto Trenteni. A raíz de esa persecución armada, que sólo por milagro no arrojó heridos, Trenteni fue acusado de abuso de armas y de portar en forma ilegal un arma de uso civil, el revólver 9 milímetros que gatilló sin cesar durante la fallida persecución que protagonizó el pasado 7 de agosto. Bajo esa acusación, Trenteni fue indagado en el juzgado de Instrucción Nº 7, a cargo de Eduardo Suárez Romero, y allí brindó una declaración que sorprendió a los investigadores: reveló la identidad del supuesto ladrón y el domicilio donde podrían encontrarlo. Según fuentes cercanas a la causa, Trenteni -señalado como campeón e instructor de tiro- dijo que "conocía de antes" y a través de un familiar al hombre que supuestamente intentó asaltarlo. Mientras tanto, el sospechoso continúa prófugo. Una comitiva policial fue a buscarlo a una vivienda de la zona sur, ubicada en un complejo habitacional sobre avenida Francia, pero no halló rastros del supuesto ladrón, cuya identidad se mantuvo en reserva. Se trata de un hombre de unos 30 años que cuenta con antecedentes penales por estafa y robo calificado, según consignaron las fuentes. El incidente se inició al mediodía en el domicilio de Trenteni y su mujer, de Pellegrini 1860. La víctima se dedica a la reparación de computadoras y el ladrón habría llegado con la intención de solicitar sus servicios. La víctima relató a los policías que, una vez dentro del departamento, el delincuente sacó un arma de fuego y amenazó a la pareja. Luego el ladrón ató a Trenteni y su esposa a una silla, guardó objetos de valor en un bolso y escapó. Entonces la víctima logró desatarse, tomó una pistola calibre 9 milímetros y salió a correrlo. En ese momento el asaltante subía a un taxi por avenida Pellegrini. Pero cuando Trenteni empezó a descargar su arma, el taxista abandonó el auto y se refugió detrás de un árbol. El delincuente también bajo del coche, se abalanzó sobre un motociclista y le robó el rodado. La moto apareció abandonada a las diez cuadras, manchada con sangre. En los últimos días Trenteni había publicado un aviso clasificado en el que ofrecía para la venta una computadora portátil. La hipótesis inicial, basada en los dichos de la víctima, fue que el delincuente llegó allí con fines de robo luego de coordinar un encuentro en relación a la venta de la PC. Sin embargo, la versión del robo comenzó a perder peso luego del testimonio de Trenteni en Tribunales. Esto acrecentó las sospechas de los investigadores, quienes comenzaron a evaluar otras hipótesis. Las dudas se basan en varios indicios. En principio, la sospechas surgieron a raíz de la excesiva agresividad con que reaccionó la víctima. La supuesta mecánica del robo también sonó inverosímil a los oídos de los investigadores: consideran poco probable que el asaltante actuara motivado por la venta de una PC a través de un aviso clasificado. Además, los testigos directos del incidente no observaron que el ladrón portara el arma que, según Trenteni, tenía al momento del robo. A esto se sumó la inusual casualidad de que el ladrón y la víctima se conociera desde antes.
| Los proyectiles impactaron en varios vehículos y una casa. | | Ampliar Foto | | |
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