Rodolfo Montes
El conflicto del fútbol tuvo ayer una nueva jornada sin novedades sustantivas. "No veo el futuro", dijo Sergio Marchi, el secretario general de Futbolistas Arentinos Agremiados, cerca de las 21, como balance de una jornada en la que se habían creado algunas expectativas. "Es un conflicto en el que nos asiste la razón -continuó diciendo el dirigente-, es un tema de derecho y no de intereses".
Luego reconoció que tuvo varios contactos durante el día con dirigentes: "Hablé tres veces con Grondona y con varios presidentes de distintos clubes a lo largo del día, nuestra actitud es de diálogo". Sin embargo, eso no implica que se acerque la solución. "Por ahora no hay reunión, no hay asamblea de jugadores. Antes tiene que haber una propuesta para evaluar, que todavía no llegó", concluyó, algo decepcionado, Sergio Marchi.
El conflicto económico que tiene parado al fútbol no logró ayer dar el paso decisivo que lo ponga camino de las soluciones. Si bien el presidente de AFA, Julio Grondona, acompañado de sus colaboradores, trabajó intensamente durante toda la jornada en busca de elaborar una alternativa para que la pelota vuelva a rodar, por ahora no aparece la luz y no hay manera de poner en caja los números.
La deuda total es cercana a los 46 millones, menos los 800 mil del Nacional B, que ya fueron saldados. La AFA tendría entre 2,5 y 3 millones propios para ofrecer, más otros 4 millones comprometidos del Banco Credicoop, aunque en este caso es un acuerdo de palabra, que no está lo suficientemente consolidado. Además de los 16 millones que corresponden al 35 por ciento de la deuda que venció el 31 de mayo pasado. Y eso es todo.
Cuando se habla de la propuesta de negociación para destrabar el conflicto, en la que la AFA ofrecería el 50 por ciento al contado y el resto en 18 cuotas, se refiere al 50 por ciento del total de la deuda y no al 50 por ciento del último tramo de dicha deuda (un 65 por ciento del total), vencido el 31 de julio pasado.
Así las cosas, esta propuesta no tiene posibilidades ciertas de ser aceptada. Sólo un milagro, que por ahora no se avizora de dónde provendría, haría que el próximo fin de semana haya fútbol en la Argentina.
Por lo demás, las versiones que señalaron, a lo largo de la jornada, que Futbolistas Argentinos Agremiados pretendía un 60% y no un 50% de la deuda, además de un acortamiento del plazo de 18 a 12 meses, no pudieron ser confirmadas.
En ese sentido, el dirigente de los futbolistas Jorge Domínguez señaló: "No evaluaremos ninguna propuesta ante los medios de comunicación antes de que sean debidamente presentadas. Por ahora no tenemos nada, estamos en veremos", señaló el Potro frente a la casa de los jugadores en la calle Salta, en pleno barrio de Constitución.
La noche de lunes caía sin que se concretaran buenas noticias para el fútbol. Los personajes de ese deteriorado barrio porteño, que andan por los bordes de la cultura urbana, ajenos a esta realidad, tomaron como siempre, posiciones en las gastadas veredas.
También en la sede de Agremiados se registró ayer la presencia del presidente de San Lorenzo, Fernando Miele, por espacio de dos horas. Se especulaba que su visita estaría relacionada con algún nivel de la negociación entre jugadores y dirigentes, ya que éste cuenta con afinados contactos con una entidad bancaria americana que en una oportunidad acudió para destrabar problemas económicos del fútbol.
Sin embargo, al salir de Agremiados, Miele señaló: "Mi presencia aquí es por el tema de un jugador. Nada tiene que ver con el conflicto con AFA, no estoy autorizado a hablar del tema".
Así y todo no es descabellado pensar que la presencia de Miele se debió, también, a garantizar la realización del partido por la Copa Mercosur que su club jugará ante Nacional de Montevideo mañana.
Todo indicaría que por esta semana Agremiados no va a decidir profundizar el conflicto extendiendo el parate al campeonato internacional, aunque esto podría evaluarse la próxima semana de no encontrarse soluciones.
En otro orden, en la AFA ayer se informó que Newell's, Argentinos Juniors, Unión y Nueva Chicago tienen confirmadas las auditorías de sus deudas con los futbolistas. Si bien no trascendieron las cifras, al menos se sabe claramente cuánto les deben a sus jugadores, lo que es un primer paso en el camino de la cancelación de la deuda. Sobre todo si se considera que esta falta de claridad en las cifras fue también motivo de retraso en los pagos.
La AFA rica y poderosa, encabezada por el viejo caudillo de Sarandí, está consumiendo los días sin poder dar solución ante la ansiedad creciente de la empresa televisiva, la gran damnificada por el parate. Para colmo don Julio, como gustan llamarlo en AFA, se dice víctima de la situación. "Dejame..., me estoy comiendo todas las cachetadas, ahora tengo que arreglar el conflicto y dar la cara", le dijo al diario deportivo Olé. ¿Quién firmó el compromiso en el Ministerio de Trabajo el pasado 10 de mayo?
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La Ciudad
