En medio de la crisis del mercado discográfico, las presiones por las ventas de los discos son cada vez mayores. Pero difícilmente algún álbum alcance el nivel de presión de "Celebrity", el recién editado compacto de 'NSync. Del éxito de "Celebrity" depende en gran medida el futuro del pop adolescente, el fenómeno musical más rendidor de la última década.
A una semana de su lanzamiento, el disco ya lleva vendidas 1,88 millones de copias en los Estados Unidos. De alguna manera, el quinteto de Orlando logró pasar la prueba de fuego, pero no alcanzó a superar el récord de su disco anterior, "No Strings Attached", que en marzo del año pasado, a una semana de su edición, alcanzó a vender 2,4 millones de unidades. El mismo día de su lanzamiento, a caballo del hit "Bye, Bye, Bye", vendió más de un millón de copias. En la Argentina, ese álbum alcanzó la categoría de disco de platino (60 mil unidades).
Así y todo, con las cifras de "Celebrity", los 'NSync superaron a sus archirrivales en la escena del pop, los Backstreet Boys. El último álbum de BSB, "Black & Blue" (2000), vendió 1,6 millones de copias en su primera semana de lanzamiento, mientras que el anterior, "Millennium" (1999), alcanzó a vender 1,1 millón en el mismo período.
A pesar de las presiones, el grupo que forman Justin Timberlake, JC Chasez, Chris Kirkpatrick, Lance Bass y Joey Fatone no esperaba superar el récord de "No Strings Attached". "Todo ese asunto ni siquiera lo consideramos", comentó Justin Timberlake al sitio de la MTV. Y Lance Bass disparó en tono irónico: "Le pedí a la compañía que editaran solamente 2,3 millones de copias, así no alcanzábamos a romper nuestro récord. Si no lo logramos va a ser bárbaro, así nuestro próximo álbum no será una competencia".
Negros y filosos
En vista de que los discos ya no se venden como antes, los medios de los Estados Unidos especulan en estos días sobre cuánto tiempo más durará la fiebre del pop adolescente. Para algunos el fenómeno está en bajada, otros, más moderados, opinan que está pasando por una etapa de transición hacia la madurez. De ser así, los •NSync llevan la delantera en este período. Mientras Britney Spears repite su fórmula y los Backstreet Boys apuestan a baladas cada vez más edulcoradas, ellos se animaron a experimentar con un cambio sonoro, sin arriesgar, por supuesto, más de lo que su público aceptaría.
En "Celebrity" 'NSync trató de sobrepasar los límites de lo que generalmente se espera de una banda de chicos. Acá también hay muchos productores con chapa, pero el 80 por ciento del material fue compuesto por los integrantes del grupo, en especial por Justin Timberlake, el líder intelectual del combo (y novio de Britney Spears).
En el álbum participan los productores Brian McKnight y Rodney Jerkins, estrellas del rhythm & blues, y también el sueco Max Martin, considerado el arquitecto del sonido del pop adolescente. Todos ellos son los responsables de la mayoría de los hits de Britney Spears, los Backstreet Boys y los mismos 'NSync. Pero el toque distintivo lo dio el productor tecno de 28 años BT, una especie de gurú electrónico que trabajó con Madonna, Tori Amos y Seal.
Basta escuchar los tres primeros temas de "Celebrity" para adivinar que hay un cambio en el sonido. El single de difusión, "Pop", el tema que da título al disco y "The Game Is Over" son una muestra de que el grupo y sus productores supieron captar lo más actual de la música negra: bases funky, el R&B más filoso y rítmico, el two step británico y arreglos vocales que están lejos de sonar angelicales. Los temas lentos son los menos, y en contrapunto abundan las canciones para la pista de baile, que constantemente recuerdan a los viejos hits de Michael Jackson.
Fama y juicios
'NSync se formó en 1996, cuando Justin Timberlake y JC Chasez, dos veteranos del programa de TV Mickey Mouse Club, se juntaron con Chris Kirkpatrick, que trabajaba en los estudios Universal de Orlando. El trío pronto reclutó a Joey Fatone y a Lance Bass, y así quedó conformado como un quinteto vocal.
Con el empresario Lou Pearlman como manager, el mismo que descubrió a los Backstreet Boys, el grupo consiguió un contrato discográfico en Alemania, donde lanzó su álbum debut, que fue un éxito en Europa con hits como "Tearin' Up My Heart" y "I Want You Back".
Después de girar por Europa y Asia por más de un año, la banda estaba lista para conquistar los Estados Unidos. A través de RCA, el grupo relanzó su primer disco, "'NSync", para el público americano a fines de 1998. El álbum llegó a vender 10 millones de copias, una cifra sorprendente para un CD debut.
Al igual que los Backstreet Boys, los 'NSync rompieron su contrato cuando sintieron que les estaban robando. Durante la grabación del segundo álbum, la banda se separó de Pearlman y la RCA, convencidos de que no habían recibido las ganancias que les correspondían de su primer disco y la gira europea. Pearlman respondió con una demanda de 150 millones de dólares, pero el asunto se terminó arreglando bajo cuerda fuera de la corte.
El segundo CD, "No Strings Attached", se lanzó finalmente por Jive Records (el sello de los Backstreet Boys y Britney Spears) en marzo del año pasado. El álbum vendió, sólo en los Estados Unidos, un total de 11 millones de copias. El grupo ganó tres premios MTV, dos trofeos de la revista Billboard Awards y tres Blockbuster Awards. Ahora los espera un tour mundial para presentar "Celebrity" y una actuación en septiembre junto a Michael Jackson, uno de sus principales referentes.
La Ciudad
