Año CXXXIV
 Nº 49.199
Rosario,
domingo  05 de
agosto de 2001
Min 16º
Máx 22º
 
La Ciudad
La Región
Política
Economía
Opinión
El País
Sociedad
El Mundo
Policiales
Escenario
Ovación
Suplementos
Servicios
Archivo
La Empresa
Portada


Desarrollado por Soluciones Punto Com





El cazador oculto
El destape llega a la radio local

Ricardo Luque

Un cross en la mandíbula. Eso fue lo que los rosarinos recibieron el jueves por la mañana cuando vieron la campaña publicitaria del nuevo programa de radio de Oscar Bertone. Y no por el primerísimo plano del barbado rostro del periodista que aparece en uno de los dos afiches callejeros que apoya el lanzamiento del envío, sino por la imagen que aparece en el otro. Allí un hombre, que se sugiere está desnudo, abre su perramus con ambas manos tal y como el imaginario popular atribuye lo hacen los exhibicionistas. El modelo, que no se sabe realmente si se trata del conductor del programa o no, está de espaldas. La frase de choque ancla la idea. "Bertone, con todo al aire", dice. El juego de palabras, poco sutil, pero muy eficaz, deja sentado que el periodista está dispuesto a jugarse a fondo en su nueva empresa. Que ni siquiera tiene reparos en poner el cuerpo en la cruzada. Es más, cuando habla de su flamante proyecto, insiste en que decidió volver a la radio, un medio que no frecuentaba desde hacía seis largos años, porque se cansó de la demagogia que impera en el medio.
¿Habrá llegado la hora de que caigan las máscaras? ¿Bertone realmente viene a ofrecer su corazón, a desnudar su alma a micrófono abierto? El tiempo dirá. Ahora, lo que sí quedó claro es que la competencia en el "prime time" de la AM local a partir de mañana se pondrá al rojo vivo. Al liderazgo que de un tiempo a esta parte mantiene Luis Novaresio desde Radio Dos le salió un rival en su terreno: la información. Porque "Los mejores", el programa que anima Norberto Chiabrando en LT3, propone una propuesta que pone el acento más en la distensión que en las noticias.
Fiel a su estilo, Bertone parece resuelto a dar la pelea con el arma que mejor conoce y que más le gusta: la terapia de shock. Todo indica que su plan es sacudir la modorra de los rosarinos con un menú picante, y de alto impacto. Antes de salir al ring ya empezó a tirar golpes. Habrá que ver cómo los asimila la competencia y también la audiencia, que en definitiva es lo único que importa.


Diario La Capital todos los derechos reservados