Las temperaturas por debajo de los cero grados registradas el viernes y sábado de la semana anterior han pasado casi desapercibidas en lo que se refiere a su efecto sobre el cultivo de trigo. Lo que sí se acentúa y comienza a visualizarse en el aspecto del gran cultivo, es la ausencia de precipitaciones generales en todo el centro del país.
Trigo
La falta de agua tiene dos efectos en el trigo, de acuerdo a la fecha de siembra y teniendo en cuenta que la sequía superficial afecta toda la zona de influencia de Rosario, como ser el centro-este de Córdoba, centro y sur de Santa Fe, centro y oeste de Entre Ríos y noroeste de Buenos Aires. En el caso de lotes sembrados durante mayo y hasta la primera quincena de junio, en este momento se encuentran en la etapa de pleno macollaje y plantas con uno-dos macollos respectivamente. En ellos aún no se nota en gran medida la falta de agua y esto es así pues su desarrollo radicular le permite captar humedad a mediana profundidad. En este caso es necesario la ocurrencia de lluvias de mediano volumen dentro de la próxima semana, pues estas parcelas están entrando en una etapa de mayor consumo de agua (3-3,5 mm/día). En el caso de lotes sembrados hacia la segunda mitad de junio y todo el mes de julio, se encuentran entre emergencia, 1-2 hojitas y pre-macollaje. En este caso, la falta de humedad en los primeros 20 centímetros del suelo afecta en mayor medida el desarrollo del cultivo pues la raíz aún no explora mayores profundidades.
En establecimientos donde en la rotación está incorporado el maíz o sorgo, por lo menos cada 2-3 años, se notan diferencias sustanciales en el desarrollo del trigo en detrimento de parcelas con monocultivo de soja o la secuencia soja/trigo todos los años. A nivel país, el avance que se registra en la siembra es del 83% de la intención original y se lentifica su continuidad de alguna manera en áreas como el sudeste de Buenos Aires debido a las precipitaciones y saturación de los suelos.
Se muestra como muy interesante tomar cobertura en el mercado de opciones, como por ejemplo puts enero 02 de $ 96/tn con $ 2,6/tn de prima.
Soja
Continúa la gran volatilidad (por condiciones climáticas en EEUU) para la conformación de los precios del disponible. Persiste además en Europa el mal de la vaca loca con ocurrencia de dos nuevos casos en España e Italia. Paulatinamente se va reduciendo los stocks de aceite de palma, principal competidor del aceite de soja. Si bien las condiciones de los cultivos en EEUU han mejorado respecto de la semana anterior, los valores se mantienen con firmeza y con una muy buena proyección en los futuros hasta diciembre de este año.
Como señal de alerta y que puede influir negativamente en los valores de la próxima cosecha está la decisión política de Brasil de autorizar la utilización masiva de cultivares GMO con su consecuente aumento en la oferta. Como contrapartida a esto pero a más largo plazo está la aprobación (antes de fin de año) del proyecto de la nueva ley agrícola en EEUU, que incluye una rebaja en el precio sostén de la soja (para la cosecha 2002/03).
Hay que recordar que el premio climático para la soja puede durar no más de 30 días y si comienza a escasear el agua en el país del norte seguramente esto se reflejará en la pizarra pudiendo entonces captarse coberturas interesantes que aseguren buenos pisos. En cambio, si el clima es favorable habrá un mercado sobreofertado para la próxima cosecha.
Maíz
A pesar de que mejora la condición de los cultivos de maíz en EEUU, difícilmente se alcancen los rendimientos proyectados inicialmente por el Usda (86 qq/ha) y, de acuerdo a la calificación actual, el estado de los lotes de este cereal es parecido al año 1995, cuando los promedios estuvieron en los 71,7 qq/ha. Esto, sumado al hecho de que ya se encuentra comprometido el 78% del total del saldo exportable de Argentina, le da firmeza al mercado para encarar los últimos 4 meses del año.
Víctor Capuccino
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