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La campana de los piqueteros

Un destacado jurista, el doctor Iván J. M. Cullen, publicó en La Capital del 23/6/01, una interesante nota titulada "La otra campana" en relación al problema de los cortes de ruta. Expone allí su discrepancia con otro abogado, el doctor Shcoler, quien sostiene que el corte de calles o rutas para hacer oír justos reclamos no es un delito y, por el contrario, es una legítima forma de defender el derecho a la vida, el primero y más elemental de todos, presionando a las autoridades en busca de urgentes respuestas. El doctor Cullen tiene, desde su óptica, buena parte de razón. Analiza los derechos humanos con enfoques ideológicos y filosóficos diversos; cita libros, autores y leyes para fundamentar su posición, lo que no entro a discutir. Pero sí me pregunto, con respeto y desde el sentido común y la fuerza que Natura nos brinda para defender el pellejo, accionando en consecuencia: ¿cree el doctor Cullen que los piqueteros de General Mosconi y tantos otros saben de derecho, ilícitos y reformas constitucionales para poder adecuar sus reclamos legalmente y en silencio? ¿Piensa que esta pobre gente, condenada por el "estado de derecho" que hace tiempo la excluyó del contrato social, matándola de hambre y abandono, tiene otros caminos mejores para hacerse oír que no sea cortar rutas y quemar cubiertas? Sería bueno que el doctor Cullen, que considera ilegítimas estas formas desesperadas para defender la vida ante el hambre y falta de trabajo, nos dijera de qué manera deben protestar los piqueteros y pueblos abandonados a su suerte para no caer en actos "ilícitos".
Roberto J. Torres