El transformista entrerriano Pablo Rey se presentará hoy, a las 21, y mañana, a las 20.30, en Golden, San Martín 3621. El actor que inició su carrera artística en Rosario está radicado desde hace dos décadas en Camboriú, Brasil, donde ofrece shows en los que satiriza la realidad y los distintos tipos humanos que caracterizan a la sociedad de esta parte del mundo en los albores del nuevo milenio.
Luego de casi 25 años de ausencia, el artista retornó a la ciudad donde hizo sus primeras armas sobre un escenario. Tras dos shows ofrecidos durante el último fin de semana, la repercusión obtenida lo obligó a volver a escena para repetir su propuesta artística.
"Mi show es muy dinámico", dijo el transformista a Escenario en un alto que impuso a sus ensayos. "Son dos horas y media de música y humor en las que me brindo a pleno y trabajo con actores rosarinos de la casa que me recibió con los brazos abiertos y a quienes quiero agradecer públicamente. No es común que te reciban tan bien después de tanto tiempo de ausencia. Parte de mi corazón se quedó en Rosario", confesó el actor.
La performance de Pablo Rey incluye playbacks de famosas cantantes como Liza Minnelli, Isabel Pantoja, María Callas en "La Traviatta" y pasos de baile en los que parodia a la primera bailarina argentina Eleonora Cassano.
"Estoy muy contento con todos y la verdad es que no esperaba este recibimiento. En Rosario comencé mi carrera a fines de los 70, pero no puedo quedarme más porque tengo que seguir en gira. Me voy a presentar en mi ciudad, Paraná, y en septiembre regreso a Camboriú, donde estoy radicado. En este momento en el que hay artistas locales de mucho renombre que no tienen trabajo, a mí me sonríe la suerte. La circunstancia me hace estar doblemente agradecido por eso estoy muy contento", enfatizó el actor entrerriano.
"Con Rosario me unen lazos afectivos muy fuertes. No olvido que en esta ciudad trabajé, en 1977, junto a figuras como Rita La Salvaje en reductos de la noche como Telarañas Show, Yo Yo y el Panamericano", reveló.
No es fácil imaginar a un transformista en aquellos años en los que esa profesión no estaba instalada en la sociedad como sucede actualmente. "Siempre fue algo difícil, pero uno es un actor y debe llevar adelante su vocación", enfatizó el actor que hoy regresará a un escenario rosarino para mostrar una rutina que él mismo se encarga de describir. "Hago playback con temas de cantantes muy famosas y por supuesto que en los parlamentos hago referencias a la actualidad. Siempre trabajo sobre un libro mío y aunque estoy acostumbrado a practicar un humor de tipo universal, en la Argentina siempre es inevitable hacer referencias a la realidad política y económica, que siempre es crítica", señaló.
A la hora de caracterizar su espectáculo lo compara con la mejor tradición del café concert. "Tengo algo de Perciavalle y de Gasalla y también cosas de Pinti", confesó. "Pero todo lo hago con un sello mío porque así se acuña la personalidad del actor. Soy sobrino de Alfredo Barbieri, pero nunca aproveché esa circunstancia y sólo luché con mi talento. En junio pasado estuve en Movete, el programa de Carmen Barbieri. Ella me regaló el material musical con el que trabajaba su padre, Alfredo Barbieri, y yo lo utilizo en mis espectáculos", destacó.
El regreso también sirvió para hilvanar recuerdos. "Claro que siento nostalgias al volver a Rosario y más cuando el regreso es exitoso", aclaró. "Vine para hacer dos funciones el fin de semana pasado y me fue tan bien que surgieron otras más para este fin de semana. No obstante este viaje tiene límites porque en setiembre tengo que estar de nuevo en Camboriú donde comienza la temporada y no puedo faltar", recalcó.
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La Ciudad
